La tecnología domina al mundo
a inteligencia artificial (IA) cambia rápidamente los liderazgos en los mercados de valores. Durante los siglos XIX y XX las empresas más valiosas perduraban a lo largo de décadas; ahora las grandes firmas que acumulan riqueza por dos, tres o cuatro billones de dólares cambian de posición con rapidez.
Hace apenas medio siglo muy pocos conocían a líderes tecnológicos; apenas se mencionaba en algunos círculos a jóvenes emprendedores como Bill Gates y Steve Jobs. Ahora, los empresarios dominantes en el mundo son de firmas tecnológicas.
Los grandes empresarios nacidos en el siglo XIX y que consolidaron sus fortunas en la primera mitad del siglo XX, como John Rockefeller, en el petróleo; Andrew Carnegie, en el acero; J. P. Morgan, en las finanzas; Cornelius Vanderbilt, en el sector naviero y ferrocarrilero, o Henry Ford, en el sector automotor, pasaron a la historia y sus descendientes ya no ocupan un espacio relevante en el sector empresarial.
En cambio, los líderes tecnológicos, nacidos en la segunda mitad del siglo XX y algunos incluso a inicios de este siglo, acumulan fortunas inimaginables en la historia de la humanidad. Personas como Bill Gates de Microsoft, Jeff Bezos de Amazon, Elon Musk de Tesla y de Space X o Mark Zuckerberg de Meta acumulan más riqueza que países enteros.
En este nicho de multimillonarios ahora se posiciona un nuevo empresario. Se trata de Jen-Hsun Huang, nacido en Taiwán y con nacionalidad estadunidense. Este gran tecnólogo revolucionó la capacidad de los GPU o unidades de procesamiento gráfico, a través de Nvidia, que comenzó operaciones con el apoyo de un crédito hace apenas 32 años y ahora es la firma más valorada en el mundo.
La razón de ese despegue es que no existe otra firma capaz de generar GPU tan potentes como los de Nvidia, por lo que en los hechos tiene un poder monopólico. Toda empresa que participe en el desarrollo de la IA requiere de sus insumos y por más esfuerzos que realizan otras firmas de oriente y occidente para alcanzarla, tardarán años en lograrlo.
Los liderazgos tecnológicos cambian con gran rapidez y quienes dominan este sector tienen una influencia económica cada vez más amplia a nivel global. Además, los tecnólogos se posicionan como las personas de mayor poder en nuestra época.