Domingo 24 de noviembre de 2024, p. 21
Hermosillo, Son., A una década del derrame de químicos en el río Sonora, los comités de Cuenca reiteraron su llamado a la titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Alicia Bárcena, para que establezca una fecha concreta para dialogar con las comunidades afectadas. La exigencia surge tras las declaraciones recientes de la funcionaria sobre un supuesto diálogo con Grupo México sobre la reparación de daños, pero sin precisar los avances ni la inclusión de las víctimas en las negociaciones.
Martha Patricia Velarde, integrante de los comités, señaló que Bárcena se comprometió públicamente a reunirse con los afectados, pero aún no ha cumplido.
Quedó formalmente en que habría pláticas; pero omitió decir cuándo. Nosotros hemos estado solicitando una entrevista con ella a través de la subsecretaria Marina Robles desde junio
, expuso.
Velarde cuestionó la opacidad en los acuerdos con Grupo México y pidió a Bárcena revelar los términos de las negociaciones. Por mandato judicial, ningún plan de remediación o reparación puede implementarse sin el conocimiento y participación de los pobladores perjudicados. Exigimos transparencia
, agregó.
Los comités de Cuenca insistieron en que las comunidades del río Sonora llevan 10 años luchando por justicia, y hasta ahora no han visto avances concretos. Las plantas potabilizadoras prometidas no se han instalado por completo, y ninguna persona enferma por el derrame de tóxicos ha recibido atención médica especializada, a pesar de los daños documentados.
Entre sus principales demandas, los pobladores exigieron establecer un diálogo directo y formal con las víctimas del derrame, transparentar los acuerdos alcanzados con Grupo México y presentar públicamente el plan de remediación; garantizar medidas reales y efectivas en la región que incluyan infraestructura, atención médica y justicia ambiental.
Piden justicia desde hace 10 años
Es inaceptable que, después de 10 años, las autoridades sigan priorizando el diálogo con la empresa responsable del peor desastre ambiental en la historia minera de México, mientras las comunidades seguimos padeciendo las consecuencias de la contaminación
, concluyó Velarde.
El derrame de 40 mil metros cúbicos de sulfato de cobre acidulado al río, en agosto de 2014, causó daños a más de 22 mil personas en siete municipios de Sonora. Desde entonces, los afectados han enfrentado negligencia institucional, incumplimiento de promesas de remediación y falta de justicia.