Santa Lucía, Méx., La Secretaría de la Defensa Nacional (Defensa) colocó una ofrenda floral en la explanada de la base aérea militar número 1 de Santa Lucía, estado de México, en honor a los integrantes del Escuadrón Aéreo 201, de la Fuerza Aérea Mexicana, por el importante servicio a la patria que sus elementos prestaron y cuya trascendencia histórica merece gratitud y admiración.

El general de división piloto aviador de estado mayor Román Carmona Landa, presidió la ceremonia del 79 aniversario del Retorno a la Patria de la Fuerza Aérea Expedicionaria Mexicana Escuadrón 201; estuvo acompañado por Guadalupe Balderas Cisneros, subsecretaria de Gobierno zona nor-oriente, en representación de la gobernadora del estado de México, Delfina Gómez Álvarez.

En este lugar, una de las moderadoras expuso que son precisamente las acciones de nuestros compatriotas y el sacrificio mostrado en batalla las que han llenado de gloria a nuestra nación, pero también deja un legado de voluntad férrea y admiración para las generaciones actuales y venideras.

El Escuadrón 201 estuvo integrado por 208 personas y participó en apoyo al grupo 58 de combate de la fuerza aérea de Estados Unidos, luego de que el 28 de mayo de 1942 el entonces presidente Manuel Ávila Camacho declaró la guerra a Alemania, Japón e Italia, integrantes de las potencias del Eje, debido a que en mayo de ese año las embarcaciones mexicanas Potrero del Llano y Faja de Oro fueron atacadas en aguas del Golfo de México por submarinos alemanes.

Después de haber realizado 2 mil 842 horas de vuelo en operaciones de combate y tras el final de la Segunda Guerra Mundial, los militares mexicanos regresaron el 13 de noviembre de 1945 a San Pedro California, en Estados Unidos, Una de sus mayores batallas fue en junio de 1945, cuando participaron en la liberación de la isla madre de Luzón, Filipinas.

Durante el acto se llevó a cabo el pase de lista y el toque de silencio para recordar a los cinco pilotos que fallecieron en combate: Pablo Ruiz Rivas Martínez, José Espinoza Fuentes, Héctor Espinoza Galván, Mario Fernando López Portillo y Fausto Vega Santander, seguido del grito unísono de ¡Murió por la patria!, que exclamaron las tropas que acudieron al homenaje.

“Recordamos con renovado fervor patrio y sentimiento de nostalgia el regreso de este selecto grupo de valientes soldados mexicanos que dieron exacto cumplimiento a la arenga pronunciada por el general Francisco Urquizo, antes de partir a la zona de hostilidades: ‘Que esta bandera vuelva con ustedes, desgarrada, quizá, por las balas del enemigo, pero colmada de gloria’.

No debemos olvidar que mientras la Fuerza Aérea Expedicionaria Mexicana estuvo en servicio, cinco de nuestros pilotos ofrendaron su vida en defensa de México en el Lejano Oriente, añadió la moderadora.