Conectará 95% de sus ciudades
Martes 29 de octubre de 2024, p. 18
Jiangsu. Si no fuera por una pantalla en medio del vagón que se vuelve testigo de la velocidad, uno no la notaría. El tren va a 348 kilómetros por hora, como para competir con un auto de Fórmula Uno. Fuera los edificios saltan uno tras otro sin que dentro se perciban el vértigo ni el traqueteo de las vías; apenas una ligera desaceleración en las curvas advierte de algún cambio en la marcha.
Inaugurada el 30 de junio de 2011, la vía de tren de alta velocidad más larga del mundo construida en una sola fase conecta Pekín con Shanghái. El trayecto entre la capital china y el centro económico más importante de la costa oriental se extiende a lo largo de mil 318 kilómetros que se recorren en 4 horas y 28 minutos y forman parte de la red ferroviaria de alta velocidad más extensa del orbe.
En total, China cuenta con más de 45 mil kilómetros de vías férreas, donde los trenes pueden correr hasta a 350 kilómetros por hora. Además de las metas para extender la red de alta velocidad en la próxima década, el país tiene el objetivo inmediato de que el próximo año 95 por ciento de sus grandes y medianas ciudades estén conectadas a través de este medio de transporte.
El tren de alta velocidad no sólo se ha vuelto pilar de la movilidad de China –el cuarto país más extenso del mundo y el segundo con mayor población–; también afianza su posición como símbolo del desarrollo tecnológico de la potencia asiática. El nuevo salto de innovación apunta a vehículos de levitación magnética que se acerquen a la velocidad del sonido, al alcanzar mil kilómetros por hora.
Por lo pronto se dispone de las vías de alta velocidad, que no desmerecen ante la opción más cercana: tomar un avión. A diferencia de un viaje en un tren normal –donde el asiento no está garantizado y se puede observar a algunos pasajeros sentados o parados entre vagones–, en el de alta velocidad todos los usuarios tienen un lugar, que varía según el costo del boleto: ejecutivo, primera y segunda clase.
El precio depende de la distancia que se recorra, el horario y la fecha en que se compren los boletos. En la plataforma de pagos Alipay se pueden adquirir los boletos, que para el mismo día pueden alcanzar 662 yuanes (mil 858.14 pesos) en segunda clase. Para acceder a la estación de trenes y el andén –que cuentan con medidas de seguridad similares a las de un aeropuerto– no es necesario presentar boleto o pase de abordar, salvo la identificación (en el caso de extranjeros, el pasaporte).