El diario El Debate de Sinaloa afirmó ayer que no cederá ante amenazas o actos de violencia, al tiempo que reiteró su compromiso de informar, pues creemos firmemente que la libertad de prensa no es sólo un derecho de los periodistas, sino de toda la sociedad, expresó.

La noche del jueves sus instalaciones en Culiacán fueron atacadas a balazos. Afortunadamente, nuestro equipo está a salvo y los daños sólo fueron materiales.

Sin embargo, la madrugada del viernes describió que, en otro acto intimidatorio, un individuo dejó una pistola de plástico en la puerta de sus oficinas en Guasave. Condenó la agresión y exigió a las autoridades una investigación a fondo, el esclarecimiento del ataque y que se lleve ante la justicia a los responsables de estos y otros atentados.

Quienes actúan desde las sombras intentan sembrar miedo y caos, aseveró; sin embargo, “EI Debate sigue firme en su propósito de informar con integridad, objetividad, y con el más alto rigor periodístico publicamos los hechos comprobables del día a día con imparcialidad y transparencia, conscientes de nuestra responsabilidad con la verdad”.

Agradeció que México y de otras partes del mundo nos han mostrado su solidaridad en momentos tan difíciles. Su apoyo fortalece nuestra determinación.

Reiteró su compromiso inquebrantable con la misión de informar. No cederemos ante amenazas o actos de violencia. Creemos firmemente que la libertad de prensa no es sólo un derecho de los periodistas, sino de toda la sociedad, que depende de medios veraces y comprometidos para mantenerse informada, y defenderemos este derecho con valentía, manifestó.

Ayer, miembros de la sociedad civil, periodistas locales, la Sociedad Interamericana de Prensa, la Universidad Autónoma de Sinaloa, la diócesis de Culiacán, defensores de derechos humanos y el gobierno del estado condenaron la agresión a esa casa editorial.

El presidente de la Asociación de Periodistas 7 de junio, Jesús Bustamante, y un grupo del gremio exigieron a los tres niveles de gobierno a que atiendan, investiguen y sancionen la embestida, porque atenta en contra de la libertad de expresión y deja en la vulnerabilidad a todos los comunicadores.

Demandó condiciones para laborar, pues al cubrir hechos de violencia, colegas son intimidados en las calles por la delincuencia organizada, que les impide hacer su trabajo.

La Sociedad Interamericana de Prensa señaló que los hechos son un ataque directo a la libertad de prensa en México, y también demandó una indagación exhaustiva para dar resultados concretos en la aplicación de la justicia.

En un comunicado, la Universidad Autónoma de Sinaloa se sumó a la exigencia colectiva por tan lamentables hechos, que lastiman al periodismo libre en el estado.

La diócesis de Culiacán, a través del sacerdote Esteban, lamentó los ataques contra personas e instituciones. Queremos elevar nuestra oración por cada familia y cada persona que haya sido perjudicada.

El Instituto para la Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas de Sinaloa señaló que la agresión armada representa un acto de violencia a la institución periodística y constituye una agresión a la libertad de expresión y prensa, pilares de la democracia.

En tanto, la Fiscalía General del Estado, a cargo de Claudia Zulema Sánchez, inició las investigaciones y refirió que desde antenoche acudieron a las instalaciones del diario para levantar evidencias, donde además había cuatro automóviles dañados.

El gobernador Rubén Rocha Moya acudió la mañana de ayer a esa casa editorial y se solidarizó con los directivos; rechazó la violencia en la entidad y aseguró al presidente de la cadena El Debate, Javier Salido, que el atentado no tiene que ver con su labor periodística y les garantizó protección.

Sostuvo que los pistoleros buscaban llamar la atención de las autoridades durante la noche del jueves, cuando ocurrieron varios hechos de violencia en la capital del estado.

Consideró que no hay persecución ni razón de los delincuentes contra los periodistas. Ni la habrá; hagan su trabajo, nosotros los vamos a cuidar, les expresó al termino de la reunión.

En la capital del estado, El Debate ya había padecido otros ataques. En 2008 sus instalaciones fueron impactadas por dos granadas, aunque no hubo muertos. En 2015, su filial en Mazatlán recibió 17 impactos de rifles de alto poder y tampoco hubo víctimas.

El asalto se da en el contexto de violencia que persiste en el estado desde el 9 de septiembre a la fecha, cuando comenzaron los enfrentamientos entre las facciones del cártel de Sinaloa Los mayitos y Los chapitos.

En ese contexto, dos cuerpos fueron localizados en un camino de terracería que conduce al poblado de San Pedro, municipio de Navolato. Estaban envueltos en una lona.