Miércoles 9 de octubre de 2024, p. 9
La Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) ha carecido del presupuesto suficiente para trabajar con la capacidad operativa adecuada ante el creciente flujo de solicitudes de refugio, sostuvo ayer Andrés Ramírez, quien concluyó la semana pasada su cargo como titular de esa instancia.
Aunque la dependencia ha contado con recursos proporcionados por el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), advirtió que sus aportaciones no son eternas y podrían comenzar a disminuir.
No puede ser que México, un país de desarrollo medio-alto, la décimo segunda economía del mundo, dependa fundamentalmente del apoyo del Acnur, eso es ridículo, es absurdo y es completamente inaceptable en este momento
, señaló al participar en un seminario sobre migración, organizado por el Centro de investigación y docencia en Relaciones Internacionales de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM.
De acuerdo con las políticas del Acnur, agregó que para esta agencia de la ONU no es eterno estar dando y dando a un gobierno que tiene las posibilidades y capacidades reales de atender el tema
. Consideró que probablemente comenzará a bajar el suministro de recursos
, lo cual, insistió, se da con todos los países del mundo.
Ramírez explicó que además se necesitan opciones para atender el fenómeno migratorio: no puede ser que la única alternativa sea solicitar protección, es una estupidez
, ya que hay flujos mixtos, en los que no todos los migrantes llegan en busca de esa opción. La mayoría pretende llegar a Estados Unidos.
Ante la carencia de alternativas, expuso que el Instituto Nacional de Migración (INM), de manera equivocada, porque se hace de la vista gorda
, daba tarjetas de visitantes por razones humanitarias a miles de migrantes, lo que generó una situación de colapso
a la Comar. Por ello, se instruyó al INM dejar de dar ese tipo de documento, sin embargo, las personas que sí buscan una protección internacional se quedaron sin respaldo.
También, lamentó la preocupante alza de la xenofobia. Como ejemplo, relató que los vecinos nos corrieron de la colonia Juárez
e impidieron que la Comar se instalara en la colonia Anzures, bajo el argumento de que vivan los refugiados... pero nos los quiero aquí
.