Por segunda ocasión en esta semana, el huracán John tocó tierra en territorio nacional. A mediodía de ayer, en Michoacán impactó como tormenta tropical y ocasionó deslaves y anegaciones en los municipios de Aquila, Lázaro Cárdenas, Huetamo, Chinicuila y Coacolman, informaron autoridades estatales y municipales.

La noche del lunes, el fenómeno meteorológico golpeó por primera vez en Marquelia, Guerrero, con categoría 3. Al otro día se degradó a baja presión remanente; el miércoles retomó fuerza como tormenta tropical frente a las costas del estado.

Después se convirtió en huracán categoría uno y este viernes entró a Michoacán como tormenta tropical para convertirse por la tarde en depresión tropical.

En esta entidad, el saldo incluye un niño que perdió la vida tras caer al río Chiquito de Morelia; así como deslaves, derrumbes y encharcamientos en Aquila y Lázaro Cárdenas.

En la capital michoacana se inició el desfogue de la presa Cointzio, que alcanzó 100 por ciento de su capacidad. Se trata de aproximadamente 10 mil litros por segundo que se conducen a través de los ríos Grande y Chiquito, por lo que existe el riesgo que se desborden y afecten al menos 24 colonias , indicó la Comisión Nacional del Agua (Conagua).

El gobierno de la capital del estado habilitó cuatro albergues para que las familias afectadas acudan, informó Protección Civil estatal.

Además, el caudal de ríos y arroyos creció significativamente. Por ejemplo, la presa Infiernillo, que también se encuentra llena, comenzó a ser desfogada, lo mismo que La Villita, que se ubica a unos kilómetros del puerto Lázaro Cárdenas.

En la carretera costera Lázaro-Cárdenas Colima hubo pequeños derrumbes, lo mismo que en la autopista Siglo XXI, que comunica Morelia con la ciudad portuaria.

Pablo Varona, edil de Huetamo, informó que seis localidades de las partes bajas se inundaron severamente por el desbordamiento del Río Balsas.

En redes sociales, el funcionario dio a conocer que el nivel del agua subió hasta dos metros, pero no hay lesionados porque el acenso fue lento, como ocurrió en septiembre de 2013, cuando la población de San Jerónimo quedó totalmente cubierta por el agua. Mandamos un dron y vemos que la gente perdió prácticamente todo lo que tenía en su casita. El agua cubrió hasta sus techumbres, publicó.

En Colima, el Sistema de Alerta Temprana para Ciclones Tropicales ubicó a la entidad en alerta naranja. Se recomienda a la población estar atenta por probabilidad de lluvias fuertes, oleaje elevado y aumento en el caudal de ríos y arroyos.

El viernes, las autoridades suspendieron clases en todos los niveles educativos y en ambos turnos como medida de precaución.

Además, se habilitaron 15 albergues temporales en 10 municipios, y la capitanía del Puerto de Manzanillo mantiene el cierre de navegación a toda nave.

En Morelos, las fuertes lluvias provocaron el desbordamiento del río de Amacuzac, que inundó varias viviendas cercanas a su cauce en este municipio, ubicado en el sur de la entidad y colindante con Guerrero, informó Protección Civil estatal.

Precisó que se desconoce el número de casas afectadas en la colonia Balsadero y en otros asentamientos humanos cercanos a la cabecera municipal.

En tanto, en el estado de México, por el deslave de un cerro a la altura del kilómetro 22, la autopista Tenango-Ixtapan de la Sal quedó intransitable y fue cerrada a la circulación.

Decenas de toneladas de tierra se desplazaron hacia la cinta asfáltica cubriendo los dos carriles hacia el Pueblo Mágico de Ixtapan de la Sal y uno hacia Tenango, se informó.

A la zona se desplazó personal de la Junta de Caminos y de la concesionaria de la autopista para evaluar los daños. El deslave ocurrió a unos kilómetros de la caseta de Los Reyes, de Villa Guerrero.

Las autoridades recomiendan a los automovilistas hacer uso de la carretera libre a Ixtapan de la Sal o la de Tenancingo Ixtapan, para llegar a la zona colindante con Guerrero.

De acuerdo con la Conagua, los remanentes de John generarán lluvias torrenciales en Chiapas, Oaxaca, Tabasco y Veracruz; intensas en Campeche, Guerrero, Michoacán y Puebla; muy fuertes en Ciudad de México, Colima, Estado de México, Guanajuato, Jalisco, Morelos, Nayarit y Yucatán.

Ernesto Martínez, Juan Carlos Flores, Rubicela Morelos e Israel Dávila