Lunes 18 de marzo de 2024, p. 25
Campeche, Camp., Unos 90 mil habitantes de pueblos rurales de Calakmul y Hopelchén padecen escasez de agua potable, por lo que son abastecidos por medio de carros cisternas que envía el ayuntamiento o compran a particulares hasta en 3 mil pesos por pipa.
Si bien el presidente Andrés Manuel López Obrador inauguró en febrero pasado el acueducto Adolfo López Mateos-Xpujil, que conducirá el líquido de la laguna de López Mateos a la cabecera municipal de Calakmul, a lo largo de 97 kilómetros, aún falta la instalación de la red de abastecimiento para que se dote del servicio a las casas de más de 70 mil habitantes de la región.
El problema se recrudece; sin embargo, en las poblaciones rurales más de 20 mil campesinos mayas, choles y tseltales se abastecen de las aguadas naturales o llenan sus tinacos en la temporada de lluvias.
En tiempos de estiaje tienen que contratar los servicios de empresas que les llevan agua a través de pipas, con costos que fluctúan entre mil 800 y 3 mil pesos, afirmaron vecinos del pueblo de Gómez Farías.
Junto con los de otras localidades rurales, han protestado por la falta de agua y el retraso en la operación del nuevo acueducto en el que se invirtieron 900 millones de pesos.