Resistencia en la región cholulteca y de los volcanes
ividir, cooptar o desintegrar a los movimientos sociales parece que es su misión. La represión selectiva es el siguiente paso, pues el manual del despojo tiene su secuencia. En esta ocasión tocó el turno a Pueblos Unidos de la Región Cholulteca y de los Volcanes, movimiento que ha enfrentado a la mutinacional Bonafont que, en complicidad con autoridades locales y federales los ha despojado de sus manantiales.
Pueblos Unidos recibió una invitación oficial nada menos que para formar parte del comité del Programa de Ordenamiento Ecológico de la Región de la Subcuenca del Alto Atoyac (Poersaa), en el que participarán instituciones del gobierno e integrantes del sector empresarial de Puebla y Tlaxcala, La respuesta de este movimiento curtido en la lucha fue tajante: No participaremos en ningún proceso del mal gobierno y el capital
, junto a quienes responsabilizan de la contaminación del cuerpo de agua. Nunca nos hemos sentado ni nos sentaremos con los criminales que han privado de la vida y libertad a nuestros compañeros y compañeras y que han lucrado y contaminado a nuestra madre tierra
, señaló la organización comunitaria.
La devastación ambiental y la destrucción de la Cuenca Alta del Río Atoyac, advierten, ha sido provocada por las industrias textileras, maquiladoras, de autopartes, metalúrgicas y por la permisividad, complicidad, corrupción y simulación de las instituciones federales y estatales
, entre las que incluyen a la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), que participará en el Poersaa.
La región cholulteca y de los volcanes padece actualmente diversos embates empresariales, entre ellos el relleno sanitario que daña los mantos acuíferos y la salud de los habitantes de los municipios de Calpan, Juan C. Bonilla y San Pedro Cholula, en Puebla; el saqueo del agua de empresas como Bonafont en el municipio Juan C. Bonilla, y la criminalización de los activistas que defienden los afluentes. La encarcelación (y posterior liberación gracias a la presión pública) de Miguel López Vega y Alejandro Torres Chocolátl es sólo un ejemplo.
¿Por qué sentarse con quiénes ordenan el despojo de su territorio y cárcel para ellos?