Sábado 10 de febrero de 2024, p. 20
Madrid. Ante el avance paulatino, pero sin tregua, de los miles de agricultores españoles que se manifiestan por todo el país para exigir una serie de mejoras, el Ejecutivo español, del socialista Pedro Sánchez, ordenó un dispositivo policial masivo, con más de 5 mil agentes movilizados, sólo para impedir que los tractores de los trabajadores del campo entren a Madrid y Valladolid, sus dos objetivos para hoy.
La tensión es máxima: van 20 detenidos por enfrentamientos con los agentes antidisturbios y más de 8 mil personas han sido identificadas que, previsiblemente, serán multadas.
En el cuarto día consecutivo de protestas, miles de personas mantuvieron movilizaciones en las carreteras, las calles de las ciudades y en las entradas y salidas de los grandes mercados de abasto.
Su objetivo es provocar una crisis de desabasto y llamar la atención de las autoridades para que atiendan sus demandas, que, al igual que el resto de los agricultores en el continente, pretenden una serie de reformas en la normativa europea de medio ambiente, además de la revisión de los acuerdos de libre comercio en negociación con el Mercosur, Chile y México, entre otros, al considerar que hay cláusulas que podrían suponer una competencia desleal a su actividad profesional.
Entre las ciudades a las que lograron ingresar con sus tractores fueron en Zamora, Pamplona, Oviedo y Zaragoza.
El objetivo de los manifestantes es entrar de forma masiva en Madrid, donde aspiran a concentrarse frente a las dependencias del Ministerio de Agricultura, y Valladolid, donde esta noche se celebrará la gala de los premios de cine Goya y a la que acudirán destacados representantes de la política nacional, encabezados por Pedro Sánchez.
También se registraron intensas movilizaciones en Italia y Polonia, donde miles de agricultores bloquearon las carreteras y denunciaron las condiciones de precariedad en el campo. Desde Bruselas, el vicepresidente económico de la Comisión Europea, Valdis Dombrivskis, defendió los acuerdos de libre comercio con terceros países, al considerar que son positivos
para el sector agrícola europeo.