Martes 2 de enero de 2024, p. 25
La mala calidad del aire y el frío no impidieron que algunos capitalinos o visitantes nacionales y extranjeros buscaran el mejor sitio para curarse la cruda o seguir libando, aunque no fue fácil porque la mayoría de establecimientos estaban cerrados
.
Tras varios intentos fallidos
, familias, amigos o parejas ingresaron al restaurante La Polar, ubicado en la colonia San Rafael, para degustar una birria y una cerveza bien fría para reponernos
, dijeron algunos entrevistados.
Joaquín aprovechó que las avenidas y calles de la Ciudad de México lucieron vacías la mañana de este lunes para trasladarse de Tlalnepantla hasta la calle Guillermo Prieto, donde se ubica la birriería y su amigo de Estados Unidos la probara.
Antes, dijo, habíamos ido a otros lugares que conocía por mis rumbos, pero todo estaba cerrado; así que me vine hasta acá y nos ayudó que no había tráfico y en cuestión de minutos llegamos y nos la pasamos muy bien
.
Luis y Antonio, por su parte, aprovecharon que “estaban cerca para llegar y seguir chupando a gusto, y sumarle unos taquitos para aguantar, porque la celebración por el nuevo año sigue, y ya mañana nos repondremos”, dijeron.
La cantina El Negresco, ubicada en la esquina de las calles Balderas y Victoria, por su parte ofrecía una deliciosa birria
a sus comensales; platillo por el cual algunos capitalinos acudieron en su búsqueda a la avenida Congreso de la Unión, sin éxito.
Otros tampoco pudieron disfrutar del menudo o pancita, pues los locales que conocemos no abrieron, así que terminamos echándonos unos tacos o un tamal para aguantar, porque al rato hay que ir al recalentado a la casa de la suegra
, comentó Salvador.
Las primeras horas de este 2024, la Ciudad de México lució con bruma, debido a la quema de pirotecnia, y solitaria, lo que aprovecharon algunos atrevidos
para correr o trotar en short, pese a las bajas temperaturas, andar en patineta o pasear a sus mascotas.
Visitantes de otras entidades, sin embargo, disfrutaron trasladarse en Metro, Metrobús o un autobús de la Red de Transporte de Pasajeros para ir a Chapultepec con toda libertad
al compartir los vagones o unidades con un máximo de cinco personas.
La posibilidad de “no ir apretujados y disfrutar el viaje nos hizo pararnos temprano y aprovechar el día antes de regresar a Mérida, aunque el frío cala muy feo, pero nos lo aguantamos porque después de tanta gente días atrás en todos lados, hoy la ciudad es nuestra
, expresaron con alegría.