La Ley de Salud Mental y Educación Emocional de Jalisco, que contenía disposiciones que permitían internar contra su voluntad a una persona de quien se sospechara un padecimiento siquiátrico, fue invalidada en su totalidad por la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).

Este asunto comenzó a discutirse a principios de noviembre y originalmente se había decidido no invalidar la ley en su totalidad, pues se consideró que contenía disposiciones que eran útiles para la salud mental de la comunidad.

Por ello se encomendó a la ministra ponente, Margarita Ríos Farjat, quien desde el principio proponía anular la ley, que presentara otra propuesta que anulara sólo algunos artículos.

Sin embargo, este jueves, al retomar el asunto, el ministro Luis María Aguilar Morales señaló que la ley impugnada contenía normas que permitían el internamiento involuntario, es decir, sin consentimiento previo e informado, no sólo de personas cuya condición mental necesite de esta medida, sino también de menores de edad e individuos en condiciones de vulnerabilidad.

Por ello planteó invalidar “también otras disposiciones que puedan afectar directamente los derechos e intereses de las personas con discapacidad, por ejemplo, las que se refieren genéricamente al bienestar mental, cuyos destinatarios, previstos en el título segundo, incluyen niñas, niños, adolescentes, personas en situación vulnerable, ancianos, así como personas en centros de reinserción social o especializados para adolescentes.