Guadalajara, Jal., Mexicanos en el cine, el volumen que presentó el fotógrafo Fernando Aceves (Ciudad de México, 1969) en la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara, reúne al menos a 200 personajes ligados a la industria fílmica en un recuento que, de acuerdo con el autor, tuvo una curaduría de la cual sugirieron nuevos modelos para lo que al final considera la tercera parte de una trilogía en la que aborda el rock y el jazz como partes iniciales.

Es la culminación de un proyecto de siete años que consistió en retratar a casi 200 cineastas, todos mexicanos, de muy diversas áreas, un proyecto que surge inspirado por la música, completa una trilogía muy ligada a mi existencia, aseguró Aceves en rueda de prensa previa a la presentación del ejemplar, anoche en la FIL.

Acompañado de Bertha Navarro, Natalia Beristáin, Martín Hernández, Rita Basulto y Eugenio Caballero, el autor y documentalista dice que el libro abarca no sólo a directores y actores, sino a personajes de diseño de audio, producción, maquillaje y “es como una cadena que forma este engranaje para hacer funcionar la maquinaria.

La idea nació a partir de una plática que tuve con mi editora durante una comida previa a una exposición sobre David Bowie en Colombia. A partir de ahí fue una exploración constante, fui conociendo a los personajes conforme esto iba avanzando y hubo que terminar siete años después porque no tenía un final claro, pero creo que se lograron cosas interesantes, explicó Aceves, quien inició su carrera como fotógrafo musical en legendarios conciertos de figuras como Billy Joel, Pink Floyd, The Rolling Stones, Madonna y David Bowie.

Sus trabajos más relevantes incluyen una sesión fotográfica con los Rolling Stones, durante su visita a la Ciudad de México en la gira del Vodoo Lounge, en 1994, y otra con Bowie en el Palacio de Bellas Artes, en 1997. Es autor de varios libros, entre los que se encuentran Retratos del rock mexicano, 50 jazzistas mexicanos y Vive Latino.

El maestro de la lente consideró que aunque el libro abarca personajes míticos de la industria fílmica nacional, como Felipe Cazals, Arturo Ripstéin o Ignacio López Tarso, también da cabida a nuevas generaciones para conformar un libro que en realidad es una sola fotografía convertida en rompecabezas.

Beristáin se dijo agradecida de formar parte de un libro que en la era digital se vuelve un objeto muy preciado, lleno de pinceladas cercanas de los personajes que lo integran y sin mayor filtro, integrando un objeto memoria.

La productora Tita Lombardo se mostró conmovida de ver reflejada amucha gente que conoció y ya no está, pero también de conocer a quienes están llegando a la industria.

El laureado director de arte Eugenio Caballero afirmó que se trata de un ejemplar muy bien editado, lleno de cariño, en el cual los retratos le hablan muy en primera persona porque se trata de gente que ha conocido o con la cual ha trabajado en algún momento de su vida, amigos cercanos varios de ellos.

Martín Hernández explicó que Fernando Aceves documentó con mucha tenacidad un material histórico, al cual se podrá regresar para ver el rostro de personajes que al ser retratados en su intimidad doméstica o laboral hablan de quiénes son.

Del cine de oro al actual

Aceves informó que hizo el libro entre 2017 y 2023 bajo el común denominador de la confianza y el cariño, la gentileza de los modelos para recibirlo en sus espacios, que son privados y casi inaccesi-bles, íntimos.

“Hay una foto hermosa de Silvia Pinal cargando la palma de oro que le dieron por Viridiana, otra de los hermanos Arriaga que acaban de estrenar su ópera prima, todo lo que ha abarcado desde la época de oro hasta estos días”, refirió.

La elaboración fue de seis años, pero por sus personajes, el libro relata en imágenes y textos cortos quizá 70 años de cine mexicano.

Rita Basulto culminó la rueda de prensa al señalar que aunque ella integra la gran familia de cineastas mexicanos, muchos de sus compañeros no tenían rostro para mí, pero a la hora de ver el libro y leer las descripciones ha sido maravilloso y un descubrimiento ponerles una cara a quienes han estado detrás de tantas películas.