El presidente Andrés Manuel López Obrador consideró que una vez publicado el decreto que establece el regreso de los trenes de pasajeros para su instrumentación es posible alcanzarla plenamente en el plazo de un sexenio, pues ya se cuenta con lo principal: las vías y el derecho de uso. A nosotros no nos va a tocar iniciar, no sabemos, uno de estos trenes, pero vamos a dejar todo arreglado para que quien nos sustituya pueda echar a andar.

Al abundar sobre los alcances del proyecto, López Obrador confirmó que a Grupo México ya le fue notificada esta nueva condición. Aún no hay respuesta pero se dijo confiado en que habrá buena actitud frente a este cambio que pretende revertir lo que consideró una decisión equivocada, cuando en 1995 desaparecieron a los ferrocarriles de pasajeros.

Explicó que el decreto establece que se dará preferencia a los actuales concesionarios de los trenes de carga para expresar su interés y un proyecto de modernización de las vías para incorporar el servicio de pasajeros antes del 15 de enero. En caso contrario, se podrá abrir la convocatoria de la concesión a otras empresas, ya se les envió incluso un escrito (a Grupo México) de lo contrario, pues queda como posibilidad para que el Estado, a través de la Secretaría de Comunicaciones, pueda concesionar el servicio.

Se trata de 18 mil kilómetros de vías, donde se operarán, inicialmente, 7 de las 17 rutas que había en el país para el traslado ferroviario de pasajeros. Subrayó que el objetivo es proporcionar un transporte más económico pues el costo de los pasajes será inferior al de los autobuses.