De febrero a noviembre de este año, la Secretaría de Movilidad (Semovi) ha revisado 12 mil 587 unidades de transporte público concesionado, lo que ha dejado 199 sanciones por diversas irregularidades.

De acuerdo con información de la dependencia, tras las inspecciones realizadas a microbuses con más de 10 años de antigüedad, las faltas más recurrentes son por las condiciones físico-mecánicas en las que se hallan, documentos como licencias tipo C y póliza vencidos, así como alteración de tarifas.

En recorridos de este diario por rutas que corren de la Central de Abasto a la estación San Antonio de la línea 7 del Metro, así como de Portales al Centro de Transferencia Modal Zapata o Félix Cuevas, se observaron unidades sucias y en las que se permite que personas se sienten al lado del conductor cuando vienen atiborrados.

En una gran mayoría los trabajadores no utilizan uniforme y hay ocasiones en que los pasajeros se sujetan a las puertas abiertas de los microbuses cuando van a llenos, y en el momento que se presiona el timbre para descender el chofer se detiene después de media cuadra.

Usuarios consultados dijeron no percibir alguna mejoría en el servicio debido a que, por ejemplo, los conductores siguen permitiendo el hacinamiento de personas y pasándose la luz roja de los semáforos sin importarles la integridad física de los usuarios ni que vengan niños o personas de la tercera edad, comentó Nancy Hernández.

Se quejaron de la forma en que manejan los choferes, al mencionar que su integridad física se ha visto afectada. “Van dos ocasiones que choca la unidad en la que viajo y me cambian de un micro a otro, además de que luego no se esperan a que bajes totalmente y arrancan, lo que me ha provocado una lesión en el pie”, dijo a su vez Alejandra Bautista.

La Semovi indicó que las rutas que más incumplimientos suman son la uno, con 25 sanciones, seguida por la 43, con 20, así como la 37 y 87 con 16 penalizaciones.