El Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) realizó una investigación de mercado para adquirir 800 claves de medicamentos necesarios para lo que resta de 2023 y 2024, en una compra complementaria a la de finales de 2022 para el mismo periodo.

Debido a que la transición del Insabi al nuevo organismo público descentralizado IMSS-Bienestar todavía no concluye, el primero aún goza de personalidad jurídica y puede efectuar procedimientos como el mencionado.

Al respecto, el Instituto Farmacéutico de México (Inefam) recordó que en la adquisición del año pasado, 30 por ciento de las claves se declararon desiertas y en otras se compró 10 por ciento de la necesidad real de las instituciones.

El director del organismo, Enrique Martínez, calculó que por esta causa, las instituciones hacen aún compras directas, las cuales han representado un aumento de 20 por ciento en la inversión pública en el periodo de 2017 a 2023.

Actualmente, sucede que los contratos que se asignaron con volúmenes de insumos menores no alcanzan a cubrir las necesidades de las unidades médicas y, de hecho, en algunos casos, se ha planteado a los proveedores la ampliación de los convenios comerciales a 20 por ciento de lo permitido por la ley.

Por separado, en reunión del director de la Organización Panamericana de la Salud, Jarbas Barbosa, con funcionarios del sector salud, Juan Antonio Ferrer, subsecretario de Integración y Desarrollo, comentó sobre la creación de una plataforma digital donde las instituciones plantean sus requerimientos de medicinas, material de curación y vacunas.

Confirmó que actualmente está en proceso la compra consolidada complementaria para garantizar el abasto de medicamentos e insumos para el resto de este año y todo 2024.

En entrevista durante la exhibición de dispositivos médicos Medical Expo, el director del Instituto Farmaceútico México (Inefam), Enrique Martínez, llamó la atención acerca de que en la investigación de mercado se hayan incluido sólo 800 claves, cuando el sector público consume entre mil 700 y mil 800 claves.

De las incluidas en la investigación de mercado, algunas coinciden con las que actualmente tienen contratos vigentes, es decir, no se compró lo suficiente y ahora se requiere complementar.

Martínez también advirtió sobre los tiempos que se toma el Insabi para realizar las adquisiciones. Si la expectativa es que los nuevos contratos garanticen el abasto de lo que resta del año, la licitación ya se tendría que haber realizado, pero a la fecha no se ha publicado la convocatoria.

De igual forma, si el plan es que lavigencia de los acuerdos comerciales sea a partir de enero de 2024, yaes tarde para llevar a cabo el proce-so administrativo de convocar, efectuar la junta de aclaraciones, recibir propuestas y emitir el fallo.