Si bien comienza a observarse una reducción de los niveles de inseguridad alimentaria postpandemia, aún prevalece el enorme desafío
de que 8 por ciento de la población de América Latina y el Caribe (más de 60 millones de personas) sufren hambre, lo que podría agudizarse con el aumento en los precios de los alimentos, la energía y los fertilizantes, advirtió Germán Sturzenegger, coordinador de la Plataforma SinDesperdicio del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Jared Laureles