Mejorar la cultura laboral y defender los derechos de los trabajadores en México es esencial para construir un país más justo y próspero, resaltó Napoleón Gómez Urrutia, senador de Morena, al rendir su quinto informe de labores, lapso en el que, resaltó, ha impulsado reformas históricas que han cambiado estructuralmente el panorama del sindicalismo y del empleo para las generaciones actuales y del porvenir.

Mi principal objetivo como senador de la República es dejar un mundo del trabajo digno, próspero, seguro y justo para las y los mexicanos, y como siempre lo he dicho: los derechos laborales son derechos humanos que se deben garantizar y no deben estar sujetos a ninguna negociación.

Acompañado de senadores de su bancada, integrantes del Sindicato Minero que preside, la comisión negociadora de Cananea y dirigentes de otros gremios, recordó que antes de 2018 los trabajadores vivían en condiciones indignas, con bajos salarios, sin estabilidad en el empleo y con dirigentes patronales producto de una cultura antilaboral impuesta en las pasadas tres décadas .

Ahora, cinco años después, resaltó, desde la Comisión del Trabajo y Previsión Social que preside se han impulsado y hecho realidad cambios trascendentales, como la reforma laboral integral de 2019, que permitió la democracia y la libertad sindical y años más tarde la modificación que acabó con la subcontratación (outsourcing), que posibilitaba explotar al máximo a los trabajadores, quienes no tenían acceso a prestaciones ni a seguridad social.

Se logró, asimismo, incrementar al doble (de seis a 12 por año) los días de vacaciones, que desde medio siglo antes no se elevaban. Se aprobaron también, agregó, reformas en materia de teletrabajo, regulación del salario mínimo, permisos por paternidad, desconexión digital, licencias para exámenes médicos y derechos laborales de las personas con discapacidad.

Sanciones a violencia y acoso

“Igualmente, promovimos la no discriminación, para que los empleadores se abstengan de solicitar carta de antecedentes no penales, cambios para sancionar violencia y acoso laboral, otras sobre lenguaje incluyente, derechos de las personas trabajadoras del campo, salud mental en el trabajo, entre muchas.

Aún nos queda un año y tenemos deudas históricas pendientes, como garantizar los derechos laborales de la gente de mar y las personas trabajadoras por aplicación, como Uber, Didi, Rappi, así como las que vayan surgiendo con el tiempo. Mi compromiso es seguir impulsando temas progresistas y de avanzada, como la reducción de la jornada laboral.

Otras de sus prioridades, agregó, son ratificar el convenio 176 de la Organización Internacional del Trabajo sobre salud y seguridad en las minas, así como el convenio 151 sobre las relaciones de trabajo en la administración pública, para que mis compañeras y compañeros trabajadores del apartado B no sean discriminados en la búsqueda de la libertad y democracia sindical.

El gobierno de la Cuarta Transformación, resaltó Gómez Urrutia, ha demostrado que las cosas en México se pueden hacer de modo distinto, orientado a los derechos humanos, la prosperidad compartida y una sana democracia que nos guíe al bienestar nacional.

El senador morenista expuso en su informe reformas que ha impulsado en otras comisiones de trabajo en las que participa, entre ellas la Ley Minera, que regula esa industria y limita sus nocivas prácticas, ayudando a proteger el medio ambiente y los derechos de las comunidades indígenas.