Domingo 17 de julio de 2022, p. 21
Madrid. Organizaciones civiles salieron ayer a las calles de las principales ciudades británicas para protestar contra la deportación a Ruanda de migrantes y solicitantes de asilo.
¡Refugiados, bienvenidos!
, corearon los asistentes en Cambridge, Cardiff, Coventry, Leeds, Mánchester, Óxford o Sheffield, informó la ONG Care4Calais.
Las imágenes difundidas en redes sociales muestran concentraciones en el Centro de Retirada de Inmigración Casa Brook, junto al Aeropuerto Internacional de Gatwick, y ante el Centro de Retirada de Inmigración de Colnbrook, junto al Aeropuerto Internacional de Heathrow.
Sabemos que hay mucha gente en contra del plan brutal de Ruanda y estamos encantados de ver a muchos de ellos haciendo que se escuche hoy su voz
, apuntó la directora de Care4Calais, Clare Moseley.
Hemos visto de cerca el costo humano de encerrar a la gente y decirles que serán enviados a Ruanda, desde intentos de suicidio a huelgas de hambre
, explicó. Ahora tenemos seis semanas para mostrar al gobierno que este plan cruel no es lo que quiere la gente de Reino Unido
, añadió.
Estas manifestaciones forman parte de la campaña #StopRwanda del Congreso de Sindicatos, Care4Calais y En Pie Frente al Racismo. Está respaldada por 11 sindicatos, incluido el de Servicios Públicos y Comerciales, que representa a más de 80 por ciento del personal de la Fuerza Fronteriza, y organizaciones de defensa de los derechos de los inmigrantes.
La ministra del Interior, Priti Patel, presentó en abril el proyecto pionero
para deportar a migrantes que hayan llegado ilegalmente al territorio británico a Ruanda, donde ofrecen gestionar su solicitud de asilo.
El primer vuelo de deportaciones estaba previsto para junio, pero un recurso judicial impidió que se consumara. Care4Calais y Acción Detención, impulsoras del recurso, han anunciado que se celebrará la deportación hasta septiembre.
El primer ministro británico, Boris Johnson, se encuentra en funciones, pero todos los candidatos a sucederle en septiembre han declarado su intención de respetar el programa de deportaciones a Ruanda.
Amnistía Internacional llamó recientemente al gobierno británico a no destinar tantos recursos judiciales y públicos a aplicar esta política atroz
y en vez de ello dar cabida a la diáspora de manera regulada.