El argumento de la reforma electoral (promovida por el Ejecutivo), según el cual la desaparición de los organismos públicos locales electorales (Oples) representaría una disminución del gasto a escala nacional es un tanto falaz, señaló Dania Ravel, presidenta de la Comisión de Vinculación de los Oples y el Instituto Nacional Electoral (INE), sin mencionar los altos salarios en esas instancias.

Justo ese es el tema en el que podría ser un tanto falaz el argumento de que es viable disminuir recursos eliminando los Oples; lo cierto es que aunque desaparezca el instituto (estatal), las actividades se deben seguir realizando. Entonces (la desaparición) implicaría dos cosas: primero, engrosar el personal que trabaja en el Instituto Nacional Electoral y, segundo, pedir mayor presupuesto para hacer esas actividades en la entidad, comentó en entrevista.

Recordó que las legislaciones electorales estatales son muy diversas, pero todas requieren personal especializado, incluso para la aplicación de mecanismos de participación ciudadana.

Al dar una actualización de la situación presupuestal de los Oples, indicó que quedaron resueltos los problemas que ponían en riesgo o aprietos los comicios estatales del 5 de junio, a celebrarse en Durango, Tamaulipas, Quintana Roo, Aguascalientes, Oaxaca e Hidalgo.

En especial, dijo, se retiró la bandera roja en Durango, cuyo instituto comicial reportó un déficit de 47 por ciento respecto de los casi 300 millones solicitados de ampliación presupuestal para este año. La única partida extra concedida fue de 19 millones. Frente al contexto anterior, destacó, se estaba poniendo en riesgo incluso la operación del programa de resultados electorales preliminares y el suministro de materiales.

Sin embargo, pese a superar esta coyuntura, la carencia de recursos podría persistir. En total, expuso, este año ocho Oples sufrieron recortes o negativa respecto al presupuesto pedido, entre los que se encuentran los de tres entidades con comicios el 5 de junio (Durango, Aguascalientes y Quintana Roo), así como Campeche, Guerrero y San Luis Potosí. Igualmente, precisó, hay rezago de este tipo en el Instituto Electoral de la Ciudad de México.

Trescientos distritos

El INE continúa la revisión de la distritación nacional electoral. De aprobarse la iniciativa de reforma que envió a la Cámara de Diputados el presidente López Obrador la semana pasada, se impactaría también el tema de la distritación.

Pero mientras se desarrolla esa discusión en el Congreso, el INE continúa su trabajo con base en el censo de población más reciente elaborado por el Inegi, el cual marca una población en México de 126 millones de personas; idealmente, cada uno de los 300 distritos debería tener 420 mil habitantes.

Al momento, el INE ha señalado que si bien hubo variaciones poblacionales en 20 entidades, no cambió el número de distritos que les corresponden; seis ganaron, mientras otras, como la Ciudad de México, disminuyó, al pasar de 40 a 22 (Censo 2020).