Doha. Seis días después de haber conseguido la segunda mejor actuación de todos los tiempos en el triple salto femenino (15.43 metros), a siete centímetros del récord del mundo, la venezolana Yulimar Rojas ganó con 15.15 metros, nueva marca del certamen en la Liga de Diamante de Doha, donde la vigente monarca olímpica colombiana Caterine Ibargüen terminó en el octavo lugar.

La saltadora, doble campeona del mundo, superó a las jamaicanas, Kimberly Williams (14.69) y Shanieka Ricketts (14.98), segunda y tercera respectivamente.

Yulimar, plata olímpica en Río 2016, cuenta con tres de las cinco mejores marcas de la historia al aire libre. El récord del orbe está en poder de la ucraniana Inessa Kravets (15.50 metros) desde 1995.

En 2020, justo antes del pa-ro de las competiciones por la pandemia del Covid, la venezolana mejoró el récord mundial en pista cubierta (15.43).

Frazer-Pryce, gana en los 100m

La jamaicana Shelly-Ann Frazer-Pryce, doble medallista olímpica y del orbe, se adjudicó los 100 metros con un crono de 10.84 segundos.

El estadunidense Rai Benjamin dominó los 400 metros vallas con récord del certamen (47.38), y Kenny Bednarek se llevó los 200 en una reñida carrera con el canadiense Andre de Grasse.

La keniana Norah Jeruto se impuso en 3 mil metros con la mejor marca de la temporada en 9:00.67, y su compatriota Timothy Cheruiyot hizo lo propio en mil 500 con 3:30.48.

Wycliffe Kiniyamal, de Kenia, se agenció la victoria en 800 metros con la mejor marca de la campaña en 1:43.91, en tanto que la estadunidense Katie Nageotte ganó en salto con pértiga, 4.84 metros.

En final de fotografía, el estadunidense Kenny Bednarek ganó los 200 metros con 19.88, superando al canadiense Andre De Grasse, 19.89.

La sudafricana Caster Semenya, doble campeona olímpica de 800 metros, falló en Durban en su segundo intento de conseguir la marca mínima clasificatoria para competir en 5 mil en los Juegos Olímpicos de Tokio. Ganó con 15:32.15 minutos, lejos del tiempo tope de 15:10.

La corredora de 30 años tiene prohibido competir en carreras de 400 a mil 600 debido a sus altos niveles de testosterona, aunque la sudafricana ha llevado su caso al Tribunal Europeo de Derechos Humanos.