Madrid/Tokio. El primer ministro de Japón, Yoshihide Suga, declaró un nuevo estado de emergencia en las prefecturas de Tokio, Osaka, Kioto y Hiogo, debido al aumento de los casos de coronavirus y con la vista puesta en los Juegos Olímpicos.

Con estas medidas, que se harán efectivas este domingo, el gobierno nipón busca hacer frente a la que es ya la cuarta ola de contagios que atraviesa el país desde que comenzó la pandemia.

El gobierno exigirá el cierre de restaurantes, bares y salas de karaoke que sirvan alcohol, y que los grandes espectáculos deportivos se celebren sin espectadores, aseveró el ministro de Economía, Yasutoshi Nishimura.

Está previsto que esta medida dure hasta el 11 de mayo, justo antes de la visita a Hiroshima del presidente del Comité Olímpico Internacional, Thomas Bach.

La gobernadora de Tokio, Yuriko Koike, pidió a la población que se apaguen las luces y los letreros de neón. Estará oscuro por la noche, en un intento por disuadir a las personas a no salir a las calles y a los no residentes que se abstengan de ingresar a la capital japonesa.

Espero que la situación mejore lo más pronto posible, dijo a su vez Seiko Hashimoto, presidenta del comité organizador de la justa olímpica, en una conferencia de prensa virtual.

Los organizadores anunciaron ayer en un comunicado que la etapa del relevo de la antorcha en la isla Miyakojima de Okinawa no se celebrará en carreteras públicas, ya que la región está sujeta en la actualidad a medidas para contener la propagación del coronavirus.

Por su parte, la canadiense Hayley Wickenheiser, integrante de la Comisión de Atletas del COI, afirmó que son expertos médicos quienes deben decidir si se celebran o no los Juegos.

La multimedallista olímpica declaró a CBC Sports que la seguridad y salud pública deben ser los factores decisivos para la celebración de la justa programados del 23 de julio al 8 de agosto; no por corporaciones y grandes negocios.

En tanto, la Federación Australiana de Clavados anunció el retiro de su equipo a la Copa del Mundo de Tokio, del 1º al 6 de mayo, clasificatorio a la justa veraniega, estimando que no es seguro enviar a sus deportistas a Japón debido al aumento de contagios por Covid.

En contra parte, el equipo mexicano de clavados, encabezado por Paola Espinosa, Alejandra Orozco y Gabriela Agúndez, ya vacunados contra el Covid, saldrá el martes rumbo a la ciudad japonesa.