El retiro de más de 20 mil millones de pesos de las Administradoras de Fondos para el Retiro (Afore), que el año pasado hicieron los trabajadores a fin de hacer frente la crisis económica por la emergencia sanitaria, pone en riesgo la posibilidad de que obtengan una pensión digna, advirtieron especialistas laborales y académicos.

Señalaron que, si bien tendrían que trabajar por lo menos dos años más, una vez que cumplan la edad de jubilación, para recuperar los recursos que retiraron en 2020, eso dependerá de otros factores, como cumplir con las semanas de cotización requeridas.

Hugo Mendoza, abogado del Centro de Reflexión y Acción Laboral (Cereal), precisó que, en efecto, el retiro de los recursos por desempleo implicará que el trabajador tenga que laborar más para poder pensionarse. Sin embargo, aclaró que ese tiempo adicional dependerá de lo que tenga ahorrado el asalariado en su cuenta de Afore y de la estabilidad del empleo, ya que en la actualidad la mayoría de las empresas contratan por tiempo determinado. La situación se complica si el ciudadano, al llegar a los 60 años de edad para su jubilación, logra seguir contratado, lo que es muy difícil para un adulto mayor.

Lo cierto es, subrayó el abogado del Cereal, que si no se recuperan esas semanas cotizadas, el mayor riesgo es que no alcancen a pensionarse. En este sentido, María Ascensión Morales Ramírez, académica de la Facultad de Derecho dela Universidad Nacional Autónoma de México, explicó que las Afore tendrán que hacer un cálculo por trabajador de a cuántas semanas cotizadas equivale el monto del que han dispuesto. Entonces, habrá dos opciones: olvidarse y aunque vuelvan a conseguir un empleo que les permita reafiliarse al Seguro Social se esperen hasta que tengan que jubilarse y en ese momento sabrán si reintegran el total de los recursos o se quedan trabajando para completar las semanas requeridas.

Otra opción es que al volver a reintegrarse a un empleo formal y con prestaciones, devuelvan los recursos y recuperen sus semanas de cotización, lo cual considera poco probable. Hizo notar que para las Afore esos retiros son nada en comparación con los más de 4 billones de pesos que administran. Sin embargo, para los trabajadores es una suma que difícilmente van a recuperar debido a la falta de un empleo formal y estable en la perspectiva económica actual.

Morales Ramírez coincidió en señalar que el tiempo que tardará el trabajador en recuperar las semanas cotizadas dependerá de cada caso, debido a diversos factores como los recursos que tenga ahorrados en su cuenta, el salario que reciba una vez que consiga un nuevo empleo y que éste sea formal y, sobre todo, permanente.

Puntualizó que si bien debido a la pandemia los asalariados han dispuesto en mayor medida de sus recursos, lo cierto es que todos los años sucede, porque el sistema de ahorro individual está hecho para una persona que tiene un empleo formal y permanente, condición que no hay en el país.

Refirió que, de acuerdo con datos de la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro, en 2016, 2018 y 2019 se registraron más de 2 millones de retiros anuales por desempleo. Tan sólo en el último año señalado, equivalió a 12 mil 30 millones de pesos.

Esta es la razón por la que los trabajadores se ven obligados a estar sacando de su cuenta, y ellos son los únicos afectados ya que las Afore no pierden, porque son sólo administradoras, subrayó.