Sábado 31 de octubre de 2020, p. 10
La sala superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) renovará su presidencia el próximo miércoles, en medio de críticas a la actuación de esta institución por haber dado registro como partidos políticos a Fuerza Social por México y Redes Sociales Progresistas, así como negarlo a Libertad y Responsabilidad Democrática.
Los reproches contra la institución también obedecen a su intromisión en la vida interna del partido Morena y a la orden de elegir a sus dirigentes mediante una encuesta, cuando ese mecanismo no está contemplado en los estatutos de la fuerza política.
Entre los mencionados para ocupar el cargo se encuentra el actual titular, Felipe Fuentes Barrera, y los magistrados Felipe de la Mata e Indalfer Infante.
Fuentes Barrera llegó a la titularidad de la sala superior en enero de 2019 para completar el periodo de cuatro años de la magistrada Janine Otálora, luego de que ésta renunció al cargo tras ser acusada de ceder a presiones del PAN para permitir que la desaparecida Martha Érika Alonso quedara como gobernadora de Puebla.
Dado lo anterior, el actual presidente puede buscar la relección en el puesto y de hecho ha manifestado a colaboradores su interés en ello, informaron fuentes del TEPJF.
A Fuentes Barrera se le ha criticado una presunta cercanía con el actual gobierno federal y que sus resoluciones estarían respondiendo a dicho vínculo.
De no lograr el consenso de sus colegas, situación que parece poco probable debido a que la mayoría de los magistrados han apoyado sus determinaciones, se mencionan como posibles sucesores a Felipe de la Mata e Indalfer Infante.
El primero casi siempre ha votado las resoluciones en el mismo sentido que el actual presidente, mientras el segundo a veces sufraga junto con este último y en otras ocasiones con Otálora y Reyes Rodríguez Mondragón, quienes han conformado un grupo disidente.
Se espera que el miércoles, en sesión privada, los jueces elijan por mayoría al nuevo directivo responsable de la sala superior para un periodo de cuatro años, y que a más tardar al día siguiente rinda protesta.
En los próximos meses, el TEPJF deberá resolver las impugnaciones que se presenten al proceso electoral 2020-2021, calificado como el más grande y complejo en la historia moderna del país.