En promedio, cada día los extranjeros sacan del país mil 200 millones de pesos, lo que ha provocado que en lo que va del año se hayan esfumado 370 mil millones de pesos, colocando el nivel de deuda gubernamental en manos de foráneos en su punto más bajo desde 2014, revelan datos oficiales.

De acuerdo con cifras del Banco de México, al inicio de 2020 la inversión de extranjeros en bonos del gobierno ascendía a 2 billones 148 mil millones de pesos, mientras al 16 de octubre pasado, última cifra disponible, se ubicaba en un billón 777 mil millones.

Gabriela Siller, economista en jefe de Banco Base, explicó que la acelerada salida de capitales extranjeros es consecuencia de una mayor percepción de riesgo sobre México.

Desde marzo, cuando comenzaron las medidas de confinamiento por el brote de Covid-19, la venta de valores gubernamentales en manos de de extranjeros se aceleró, llegando a estar en julio en un billón 782 mil millones.

A partir del regreso de las actividades comerciales, las salidas se detuvieron e incluso aumentó ligeramente la inversión durante agosto y septiembre. No obstante, dijo Siller, el temor a una segunda ola de la pandemia ha inyectado inquietud de que la economía mexicana se vea otra vez afectada.

De hecho del 30 de septiembre al 16 de octubre pasado, la salida de capitales foráneos se ha acelerado al grado de registrar un promedio diario de mil 500 millones de pesos.

La economista explicó que la venta de bonos gubernamentales por parte de inversionistas extranjeros se dio desde el inicio de la pandemia, como consecuencia de la incertidumbre sobre la magnitud del impacto que tendría en la economía, tomando en cuenta que no habría estímulos fiscales.

Resaltó que hasta antes de la pandemia la alta tasa de referencia que tenía México servía para atraer inversionistas de otros países; sin embargo, quedó demostrado que ante el pesimismo a nadie le importan los intereses que se paguen, pues los capitales salen en búsqueda de países y activos con menores riesgos.

Desde su punto de vista, el hecho de que durante octubre se haya acelerado la caída de la tenencia de bonos del gobierno en manos de extranjeros es consecuencia directa del aumento en los casos de coronavirus, pues ponen en duda la recuperación global, sobre todo la de Estados Unidos, de la cual depende México.

Siller advirtió que la percepción de riesgo de México ha aumentado de manera importante debido a que la economía no resistiría un segundo confinamiento social con el cierre de varias industrias sin una política fiscal contracíclica del gobierno que apoye la recuperación, la cual no existió con el primer ataque de la pandemia.

El 21 de febrero de 2020 la tenencia de valores gubernamentales alcanzó su nivel más alto al ubicarse en 2 billones 214 mil millones de pesos, lo que significa, que desde entonces al 16 de octubre pasado, la fuga de capitales asciende a 436 mil millones de pesos, es decir, una caída de aproximadamente 20 por ciento.