Locatarios de la calle Madero, en el Centro Histórico, reportaron saldo positivo a cuatro días de su reapertura.

El jueves pasado, a las cinco de la tarde, las autoridades reabrieron la calle para que la gente pudiera caminar en doble sentido y este sábado tuvimos una gran respuesta en materia de ventas, comentó María Fernanda Islas, locataria de la zona.

Indicó que esperan que esta semana siga siendo positiva para todos los negocios, ya que también se reabrió la estación Allende del Metro. Todo el primer cuadro ya fue reabierto y, de hecho, se espera que el domingo 18 la mayoría de los 3 mil 500 establecimientos que existen en el Centro Histórico estén abiertos y la gente siga las medidas sanitarias y los visite. Aunque los bares seguirán operando hasta las 11 de la noche, añadió.

Indicó que en breve planteará dos peticiones a la Secretaría de Gobierno y a la Autoridad del Centro Histórico.

Una para que se apoye a los restauranteros a fin de que se les permita tener empleados con banderines afuera de sus negocios para que, sin entregar volantes, puedan hacer promoción a sus restaurantes y la gente sepa que puede entrar a consumir alimentos.

Y la otra, que las autoridades entreguen gafetes a los proveedores con el fin de que puedan descargar sus productos en las horas estipuladas en la Gaceta Oficial de la Ciudad de México.

Y es que, explicó: “Tenemos un problema muy grande, pues oficiales de la SSC (Secretaría de Seguridad Ciudadana) han estado extorsionando a nuestros compañeros; no los dejan cargar gas, les cobran 300 pesos por ello o simplemente por permitir que los proveedores bajen sus productos.

“Dicha situación ocurre en la zona de los portales y en la calle Bolívar, donde para todos los que tienen restaurantes es muy difícil que los dejen descargar, a pesar de que en el Centro está decretado que pueden hacerlo de 7 a 10 de la mañana.

“Creo que esto se podría solucionar si cada restaurante contáramos con gafetes para dar a los proveedores con la hora marcada establecida en la Gaceta Oficial.”