A partir de mañana estará disponible la vacuna contra influenza en las unidades de medicina familiar (UMF) del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), aseguró Víctor Hugo Borja, director de Prestaciones Médicas.

Dijo que ese mismo día concluirá la aplicación del biológico a los trabajadores del instituto y de manera progresiva se le pondrá al resto de los grupos de la población considerados de riesgo.

Ante las diversas informaciones que se han difundido sobre la carencia del biológico, el director del IMSS, Zoé Robledo, comentó en conferencia de prensa que las primeras dosis entregadas al organismo se destinaron a la protección de sus trabajadores, sobre todo aquellos que han estado en la atención de enfermos de Covid-19.

De la misma manera, destacó, el instituto se ha ocupado de brindarles apoyo sicológico, pues después de las largas jornadas de trabajo y en las condiciones más difíciles, se ha visto la necesidad de darles ese apoyo, incluso a los médicos de las áreas críticas, quienes están entrenados para hacer frente a problemas complejos de salud.

Comentó que han atendido a más de 28 mil personas de las áreas médicas en terapias grupales y 20 mil 800 en sesiones individuales, en las que se detectaron 31 mil alteraciones emocionales.

Sobre la vacuna contra influenza, Manuel Cervantes, coordinador de Atención Integral del Primer Nivel, explicó que para evitar filas y aglomeraciones en las unidades de salud, se prevé que a los derechohabientes, sobre todo adultos mayores, se les ponga en los días que tengan programada su consulta de rutina con el médico familiar.

Señaló que sólo el IMSS aplicará 14.4 millones de dosis, en las cuales se invirtieron 800 millones de pesos.

Por otra parte, Norma Gabriela López Castañeda, directora de Incorporación y Recaudación del instituto, informó que entre enero y septiembre se captaron 261 mil millones de pesos por cuotas obrero- patronales, monto que representa un incremento de 2.5 por ciento respecto al mismo periodo de 2019.

Sobre la meta para 2020, dijo que sólo faltan 9 mil millones de pesos. Reconoció que durante enero y febrero, cuando todavía se reportó crecimiento de la economía y el empleo, se mitigó la caída en los ingresos durante la pandemia.

La funcionaria también admitió los desafíos que enfrenta el IMSS con patrones que fingen la existencia de la relación laboral e incurren en prácticas de subregistro con esquemas de no subordinación, a los que se conoce como asimilables. El instituto estima que hay alrededor de 630 mil personas con esta clasificación, pero en realidad son trabajadores.

En otros casos, principalmente las empresas de outsourcing, reportan salarios de cotización 40 por ciento por debajo de lo que realmente pagan. Otra forma de evasión está en los empleadores que fingen la existencia de la relación laboral. López Castañeda explicó que las personas reactivan sus semanas de cotización y reciben las prestaciones.

Aunque 42 por ciento de los asegurados se mantiene afiliado entre 12 y 18 meses, por su edad, que es de 55 a 64 años, los costos de la atención médica que reciben son elevados. Con frecuencia esta reactivación tiene el objetivo de que el empleado cumpla los requisitos para obtener una pensión. Al año representan alrededor de 500 millones de pesos, explicó.