Necaxa hizo poco, pero lo suficiente para vencer 2-0 al Atlético de San Luis en un partido a puerta cerrada por sanción, en la fecha 18 del torneo Apertura 2019.

Con este resultado, los necaxistas coronan una estupenda temporada regular en la que desplazó del subliderato al América, al alcanzar 31 puntos. El San Luis quedó, con 20 unidades, quedó postrado en el puesto 14 de la tabla.

Aquello del jugador número doce, para referirse al publico que anima los partidos de futbol, fue más real que nunca. En el Alfonso Lastras, sancionado por los disturbios que ocurrieron en sus gradas en la pasada visita del Querétaro, reinó el silencio.

Y como si el ambiente desolado se contagiara a los jugadores, el duelo carecía de emoción ante las tribunas vacías. Durante más de media hora el juego parecía que no culminaría en anotaciones, pues los embates del Necaxa se difuminaban en remates pasados, centros adelantados o mala puntería.

Mauro Quiroga había intentado en varias ocasiones y el tanto se le negaba. Pero a los 32 minutos, un centro de Kevin Mercado fue prendido con la cabeza por Quiroga y por fin abrió la cuenta para Necaxa.

Hubo algunos amagos más, pero como si el tanto les bajara las revoluciones, no lograron ampliar la diferencia en la primera parte y en silencio, ambos equipos se marcaron al vestidor en el intermedio.

Al volver, Necaxa descuidó el ímpetu y perdió el control de un partido que parecía definido. Al ceder el ataque al San Luis, los Rayos parecían un equipo más defensivo que cuidaba su magra ventaja.

Luis Reyes tuvo a tiro el arco del Necaxa, en lo que parecía el empate, pero el disparo de más de treinta metros de distancia se fue por encima. Sólo quedó en susto para los visitantes.

El último tramo fue aún más de-sangelado. Sin el fuelle que mostró el San Luis al volver del descanso, como si diera por perdido el partido. Los rojiblancos, en cambio, paladeaban el buen paso del torneo a punto de coronarlo como una de sus mejores participaciones.

Ya en tiempo agregado, cuando todos pensaban más en marcharse al vestidor, un descuido de la defensa del San Luis fue aprovechado por Cristian Calderón, que se metió sin sombra alguna al área, para recibir y fusilar al portero sin problema para dejar el marcador 2-0.