Domingo 28 de julio de 2019, p. 33
La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) llamó a los gobiernos a que adopten medidas más contundentes para combatir la pandemia mundial de obesidad, utilizando políticas fiscales y jurídicas concretas para promover dietas más saludables para la población.
Expuso que actualmente es difícil encontrar alimentos saludables en las ciudades e hizo hincapié en que existen instrumentos de política para mejorar la accesibilidad y los precios de las dietas nutritivas.
En el reciente informe El estado de la seguridad alimentaria y la nutrición en el mundo 2019, alertó sobre todas las formas de malnutrición, y en este contexto el avance de la subnutrición y a la par del sobrepeso y de la obesidad. Según la FAO por cada persona que sufre hambre, más de seis personas sufren sobrepeso. En los infantes, a escala mundial, el sobrepeso afectó a 40.1 millones de niños menores de cinco años en 2018.
Graziano da Silva, director general de la FAO, abordó el tema al recibir el Premio a la Inspiración en Nutrición, otorgado por la Alianza Mundial para Mejorar la Nutrición. Da Silva ha trabajado en contra de la malnutrición tanto como ministro especial para la Seguridad Alimentaria en Brasil, y luego como director de la FAO, en donde ha hecho de la nutrición una prioridad estratégica para el organismo.
De acuerdo con la OMS las dietas poco saludables y la malnutrición son responsables de casi una de cada tres fallecimientos, y las enfermedades no transmisibles, impulsadas en gran medida por dietas deficientes, cuestan al mundo más de 7 billones de dólares.
Crece el hambre en AL y el Caribe
El premio se otorgó en coincidencia con una mesa redonda centrada en la labor reciente de la FAO en la lucha contra el hambre y los desafíos futuros que plantean el aumento de la población mundial, la rápida urbanización y los cambios en las dietas, en especial en los países de ingresos bajos y medios.
En los pasados años la FAO ha hecho que la nutrición ocupe un lugar más destacado en la agenda mundial. Da Silva ha insistido en sus ocho años al frente de la FAO que el planeta produce alimentos suficientes para todos, pero esto no ha llevado al fin del hambre, y recordó que ahora acechan problemas de nutrición más complejos, como el sobrepeso y las enfermedades relacionadas con las dietas.
La FAO ha alertado que el hambre está creciendo en América Latina y el Caribe, y en 2018 llegó a afectar a 42.5 millones de personas, esto es 6.5 por ciento de la población regional.