Ante el aumento de peticionarios de refugio, vecinos de la zona en la que se ubica la oficina de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), en Tapachula, Chiapas, piden a esta dependencia mudarse, debido a que los extranjeros usan la vía pública incluso para hacer sus necesidades fisiológicas.

El titular de la Comar, Andrés Ramirez, dio la razón a los afectados, en cuanto a los inconvenientes de tener cada vez más a más personas apostados en una zona habitacional.

Señaló que se gestiona con Petróleos Mexicanos la firma de un convenio para que la Comar pueda utilizar un amplio terreno de esta empresa productiva del Estado.

Sin embargo, el trámite no será de inmediato y el cambio sería efectivo hasta dentro de varios meses, según estimó el funcionario.

En el primer semestre del año, la Comar recibió 25 mil solicitudes de refugio, de las que 4 mil 888 recibieron respuesta positiva. No obstante, persiste un rezago de poco más de 12 mil casos que atañen a una importante comunidad que se ha quedado asentada temporalmente en la frontera sur en espera de concluir su proceso.