El primero criticó la reforma laboral
El dirigente de la CTM acusó al ferrocarrilero de corrupción
Jueves 25 de julio de 2019, p. 12
La reunión en parlamento abierto de las comisiones que dictaminan las modificaciones a la reforma laboral derivó en enfrentamiento entre Carlos Aceves del Olmo, secretario general de la Confederación de Trabajadores de México (CTM), y el controvertido dirigente ferrocarrilero, Víctor Flores Morales, a quien el senador priísta acusó de corrupción y de quererse apoderar del Congreso del Trabajo (CT).
Como habían hecho antes dirigentes del viejo sindicalismo, Flores Morales criticó la reforma en materia de libertad y democracia sindical a la Ley Federal de Trabajo (LFT) realizada en abril pasado y planteó que los dirigentes no tienen por qué hacer públicos los recursos gremiales que manejan. Incluso acusó a los senadores de haber aprobado normas que atentan contra el sindicalismo y sus organizaciones
.
Para sorpresa de otros representantes sindicales y empresariales y senadores de las comisiones de Trabajo y de Anticorrupción presentes, en cuanto el dirigente ferrocarrilero concluyó su intervención y entregó un escrito con sus propuestas a los integrantes de la mesa directiva, el senador Aceves del Olmo lo increpó y le dijo que se creyó dueño del CT y ahora está llorando
porque él acaba de ser relegido al frente del organismo cúpula del sector obrero.
Desde el presídium, en su silla de ruedas, Aceves del Olmo siguió con su ajuste de cuentas contra Flores. Lo acusó entonces de llevar porros
al acto y de aliarse con el morenista Pedro Haces, dirigente de la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México, porque cree que es muy cercano al presidente Andrés Manuel López Obrador.
Con sus habituales lentes oscuros, Flores Morales (a quien colocaron junto a los demás invitados en los escaños del salón de la Comisión Permanente donde se realizó la mesa sobre libre sindicalización y negociación colectiva) quiso rebatir al cetemista y a gritos trató de intervenir, pero Aceves del Olmo nunca le dio la palabra. En este Senado el único senador obrero soy yo
, resaltó Aceves del Olmo.
Agregó que lo único que falta es que a Pedro Haces lo hagan ferrocarrilero para tapar todas las broncas
que Flores tiene, entre ellas la deuda de más de 15 mil millones a las viudas de trabajadores del riel. Incluso de-sechó el documento entregado por Flores, aunque al final debió rectificar –luego de la intervención de los senadores– y hasta ofrecer disculpas si había ofendido a alguien
.
El ferrocarrilero aguantó las más de tres horas de reunión y salió corriendo para evitar a los reporteros.
El que contestó más tarde a Aceves del Olmo fue Haces, al aludir en otra mesa de trabajo a quienes se oponen a la reforma como viejos intereses que ya apestan
y resaltó que es una vergüenza
que la CTM haya presentado amparos contra la reforma laboral que su líder votó en el Senado.
Isaías González Cuevas, de la Confederación Regional Obrera Mexicana; Sergio Beltrán Reyes, de la Confederación Internacional de Trabajadores, y el asesor jurídico de la CTM, Ángel Celorio, plantearon modificar la disposición que permite que las cuotas sindicales sean opcionales.