Domingo 21 de julio de 2019, p. 3
Recuperar ese país que Rodrigo Moya capturó con su lente a mediados del siglo pasado es el propósito del rally Deriva Moya, que se realizará del 9 al 16 de agosto en el contexto de la magna exposición que el Museo del Palacio de Bellas Artes y el Centro de la Imagen dedican al fotógrafo de origen colombiano.
La dinámica de esta actividad, abierta al público en general, consiste en una ruta de 22 sitios de la capital de la República retratados por Moya hace medio siglo y que hasta la fecha se mantienen casi intactos. El propósito es que los participantes tomen imágenes similares a las captadas por el maestro y las envíen a concurso.
Los ganadores se harán acreedores a publicaciones del Centro de la Imagen y libros de fotografía, así como de una mención especial, una impresión en plata sobre gelatina de un original de Rodrigo Moya.
La ceremonia de premiación será el 25 de agosto en el Palacio de Bellas Artes a las 12 horas, con la asistencia del artista y Laura González Flores, curadora de la muestra. Las bases del certamen se encuentran en la página de Internet de ese recinto museístico (http://museopalaciodebellasartes.gob.mx/rodrigomoya).
Cuentafotos
Como parte también de las actividades paralelas de la exposición, los fines de semana la narradora oral Gabriela Villa realiza una visita guiada por la misma, con un espectáculo de cuentafotos, que consiste en una serie de narraciones a partir de las imágenes que forman parte de la muestra, desde el punto de vista no documental, sino de la ficción.
Buscamos destacar lo que hay detrás de las imágenes, lo que sugieren, ese significado polisémico que tienen. Son historias totalmente ficcionadas, pero tenemos la autorización de Rodrigo Moya. El propósito es sugerir y despertar la imaginación del público.
Integrada por 228 piezas, la muestra Rodrigo Moya-MÉXICO/Escenas fue organizado por el Museo Amparo, de Puebla, en colaboración con el Centro de la Imagen y el Palacio de Bellas, en el contex- to del 85 cumpleaños del fotógrafo de origen colombiano, cumplido en abril pasado.
Está dividida en dos grandes segmentos. El primero con sede en el Museo del Palacio de Bellas Artes (en las salas Paul Westheim y Justino Fernández) y en él se da cuenta de esa transición que experimentó México de lo rural a lo urbano a mediados del siglo XX, así como a través de retratos de las figuras de los ámbitos de la cultura, el arte y los espectáculos de aquellos años.
El segundo, en tanto, ocupa las instalaciones del Centro de la Imagen y rinde testimonio de trabajo fotográfico realizado por Moya en el campo mexicano, el ámbito obrero y la dinámica social.
En conjunto, ambos segmentos evocan el México que el artista retrató entre 1955 y 1968 como fotorreportero de publicacionescomo Impacto, Siempre!, Hoy, Mañana y Sucesos Para Todos.
No es el México oficial, sino el país en toda su complejidad. De acuerdo con González Flores, el fotógrafo tiene la capacidad de sacar lo contrastante de la realidad. Detrás de lo que se ve siempre hay algo más crítico.