Petróleos Mexicanos (Pemex) debe enfocarse en buscar asociaciones con empresas privadas y no asumir en su totalidad los riesgos para explorar campos. Además, una baja en sus niveles de deuda provocará que el acceso a financiamiento se vuelva más complicado, según un reporte del Centro de Estudios de Energía de Rice University.

El organismo detalla que la empresa productiva del Estado debe considerar la inclusión de asociaciones entre firmas privadas, los denominados farmouts, con el fin de elevar los niveles actuales de producción, los cuales, a mayo pasado, según cifras oficiales, reportaron una caída de 10.10 por ciento.

El fortalecimiento de Pemex requiere el desarrollo de una cartera sólida de proyectos, así como importantes inyecciones de capital. Las alianzas con empresas privadas podrían facilitar ese proceso. No necesita asignar fondos para 100 por ciento de proyectos ni tiene que asumir 100 por ciento del riesgo de los mismos, expone.

Precisa que la petrolera podría diversificar efectivamente su cartera de inversionistas al participar en múltiples proyectos con diferentes socios, beneficiándose de la transferencia de tecnología y teniendo una asignación de capital más eficiente.

Una cartera diversificada permitiría a Pemex estar mejor preparada para cubrir la volatilidad del precio del petróleo como sus pares. La reciente rebaja de la deuda de la petrolera hace que el acceso al capital sea más costoso y difícil.

Indica que las empresas energéticas privadas están dispuestas a asociarse con la empresa productiva del Estado, siempre y cuando los farmouts estén abiertos, para que de esta forma los privados cuenten con capital y reduzcan los costos exploratorios para la petrolera, hecho que podría ayudarla a aumentar la producción.

Esto, luego de que Pemex presentó el Plan de Negocios, el cual expone que ahora las empresas privadas participarán vía los contratos de servicios integrales de exploración y extracción, que tienen una duración de entre 15 y 25 años, en los que la petrolera mantiene la titularidad de los campos de exploración y las remuneraciones para los inversionistas serán mediante una tarifa en dólares por unidad de hidrocarburo producido.

El Centro de Estudios de Energía de Rice University pide a la compañía ser realista y no esperar que haya resultados inmediatos en lo referente a la recuperación de la producción de hidrocarburos mediante la exploración de aguas profundas, pues éstos requieren tiempo para madurar.

Dado el tiempo necesario para ejecutar completamente perspectivas de producción comercial (desde la exploración hasta la entrega de petróleo y/o gas al mercado), no se puede esperar razonablemente que la mayoría de los contratos adjudicados en los pasados cuatro años hayan entregado resultados apreciables, especialmente las perspectivas en aguas profundas.

Considera que sería lógico que la empresa productiva del Estado implementara cronogramas de proyectos que pudieran revisarse para un progreso razonable, siempre que se reconocieran los impedimentos regulatorios y contractuales.