El Consejo Nacional del PRD aprobó ayer la realización de su décimo sexto Congreso Extraordinario para finales de agosto, con el propósito de hacer cambios a sus estatutos y prepararse para la elección de su nueva dirigencia nacional en noviembre o diciembre próximos.

La dirigencia del partido estima que para ese mes el número de personas que hayan refrendado su militancia llegará a 500 mil, quienes podrán participar en los comicios internos que se tiene previsto organice el Instituto Nacional Electoral.

Los consejeros avalaron que la actual dirigencia nacional extraordinaria organice el congreso del 31 de agosto y primero de septiembre.

Entre las reformas que se impulsarán se encuentra la de volver al modelo de comités ejecutivos encabezados por un presidente y el secretario general. Esas figuras desaparecieron por acuerdo del congreso de noviembre de 2018.

Las modificaciones al estatuto también tienen como finalidad preparar al PRD para crear una nueva plataforma política al lado de organizaciones sociales.

Sobre la posibilidad de que en ese acto se modifique el nombre del partido, la dirigencia señaló que ello no sucederá, pero podría analizarse en un siguiente congreso.

Mientras tanto, liderazgos perredistas siguen dialogando con académicos, ex panistas y ex priístas con el fin de integrar una fuerza política con mayor fuerza.