Hicieron una inauguración lúdica de su exposición Retablos de asombros y metamorfosis en Casa Lamm // ‘‘Es tiempo de cultivar la esperanza’’
Viernes 5 de julio de 2019, p. 4
Vestidos con su traje compartido de luchadores por el arte, los pintores Marisa Lara y Arturo Guerrero, fundadores de Siameses Company, inauguraron en forma lúdica su exposición Retablos de asombros y metamorfosis la noche del miércoles en la galería del Centro de Cultura Casa Lamm.
La muestra ocupa dos salas. La primera consta de 25 grandes dibujos de sujetos ‘‘impregnados de vida, de emoción y de alma para que vibren, griten, se enojen, canten, se revuelquen, pero que vivan”, apunta Marisa Lara en entrevista.
Fue en esa sala donde la pareja, que trabaja al alimón, realizó un performance de apertura que involucró al entusiasta público. Consistió en ‘‘un ritual para sembrar anhelos”, pues ‘‘creemos que éste es un tiempo para cultivar la esperanza, para que florezcan las ideas, para que los pensamientos fructifiquen y se vuelvan fértiles”.
Encontrar y reconocerse en la otredad
Los artistas llevaron flores de pensamiento, cuyas semillas repartieron entre los asistentes, los que hicieron fila para depositarlas cuatro que fueron entregadas a cada quien en un pequeño depósito con tierra para su cultivo.
Cada depósito era cubierto por un papel con el nombre del participante. A manera de un coro griego los asistentes decían ‘‘sembrar anhelos”, mientras el binomio pronunciaba frases como ‘‘éste es el ruego del arte para que la destructiva locura del mundo se detenga y cultivemos en nuestro corazón las diferencias entre los iguales”.
La segunda sala, la principal de la muestra, aloja la obra pictórica en forma de ‘‘portaanhelos” o valijas pintadas, colgadas sobre la pared. También comprende siete pequeñas esculturas realizadas en resina que llevan títulos como Siameses Company, Chamán de la dualidad, La barca de los amorosos, Siameses luchadores y Comprometi-dos.
Respecto de la propuesta de la exposición Marisa Lara explica que ésta es ‘‘encontrar y reconocerse en la otredad”, una noción manejada por ellos desde hace mucho tiempo.
La idea y el anhelo ‘‘justamente es llamar al aquelarre de la inclusión, romper los cartabones, transgredir los estereotipos, combatir la indiferencia y la apatía, abrir las puertas al pensamiento y a la frescura, hacer del arte una verdadera herramienta también de la felicidad, de voz y de autorreconocimiento”. Asegura que el arte ‘‘tiene que ser un vehículo de empatías, un vaso comunicante para las personas, por eso el arte está lleno de rebeldía. El verdadero arte, como decía André Breton, es el que te mueve y te conmueve. Por ese arte apostamos nosotros”.
En esta ‘‘fiesta” que deviene de la exhibición se celebra la diversidad cultural, sexual, de gustos y el mundo de los animales, apunta Guerrero. Es ‘‘una reflexión sobre el festejo de la vida y el arte como una forma de diversidad”, de allí las múltiples experiencias representadas.
Que las obras dejen de ser objetos y se vuelvan sujetos
Retablos de asombros y metamorfosis es el resultado de varios años de quehacer. ‘‘Es un trabajo muy riguroso hecho gracias a muchas horas, días, semanas y años de labor, porque nos importa el oficio. Hacer del color un vehículo de expresión y por eso hemos querido que las obras dejen de ser objetos y se vuelven sujetos”, refiere Lara.
La exposición Retablos de asombros y metamorfosis, montada en el Centro Cultural Casa Lamm (Álvaro Obregón 99, colonia Roma), concluirá el 4 de agosto.