Domingo 30 de junio de 2019, p. 6
Cada siete años hay uno de la Luna, y quienes cuyas vidas están dirigidas por sus emociones sufren depresiones aún más intensas en ese periodo, lo mismo que aquellos con 13 lunas nuevas. Cuando ambos grupos coinciden pueden suceder inconcebibles tragedias personales
, explica el cineasta alemán Rainer Werner Fassbinder en la introducción de Un año con trece lunas (1978), su trigésimo cuarto filme, realizado a los 33 años de edad, en el frenético y a veces enloquecido ritmo con que producía películas, televisión, radio y teatro.
En el siglo XX, a esta peligrosa constelación corresponde ocurrir seis veces. Una es 1978. Antes, 1908, 1929, 1943 y 1957. También 1992 será un año en que las vidas de mucha gente estarán amenazadas, explicaba el realizador, al que le quedaban solamente cuatro años más de vida de un periodo creativo que fue de poco más de 13.
Como estudiante del Centro Universitario de Estudios Cinematográficos de la UNAM, en las clases de historia y lenguaje cinematográfico de Jorge Ayala Blanco, Sonia Riquer –ahora periodista y crítica de cine– encontraba seductoras las cintas de Fassbinder, si bien frías y difíciles de ubicar
. La primera biografía suya le hizo pensar que era un hombre al que no me habría gustado conocer personalmente
, aunque su cine le parecía cada vez más interesante.
“Mi enamoramiento comenzó –lo tengo clarísimo– en una función en la facultad de Sicología de la UNAM que proyectó Sólo quiero que ustedes me quieran (1975). Seguía sus películas donde las pusieran”, explica la periodista, que acudió por primera vez a la Berlinale en 1993 y que desde 2001 va cada año, tomando la estafeta de Ayala Blanco, quien lo hizo durante 25 años.
Antes de mirar los 13 episodios con un epílogo que conforman la serie Berlin Alexanderplatz (1980), la investigadora leyó la novela homónima de Alfred Döblin publicada en 1929. Continuó leyendo y releyendo cuanta biografía, filme, entrevistas, sobre el emblemático realizador del Nuevo Cine Alemán encontraba, para acabar por armar un primer curso literario-cinematográfico sobre Döblin y Fassbinder en la Cineteca Nacional en agosto de 2017.
Durante el Año Dual México-Alemania, 2018 Riquer produjo para Radio Educación y el Instituto Goethe de México el proyecto Radio Fassbinder, en el que coordinó la traducción y la realización, por primera vez, al español de cinco obras escritas especialmente para radio por este incontenible artista
: Nadie es malo, nadie es bueno; El consejo familiar; Toda de blanco; Ifigenia en Tauride, y Preparadise sorry now, una experiencia tan interesante como dificil, comenta.
Vertiginoso
Fassbinder andaba a una velocidad de vértigo y resulta complicado seguir sus pensamientos y propuestas. Además, se expresaba con gran libertad y sin prejuicios. Muchas de sus creaciones hoy serían consideradas políticamente incorrectas. A muchos seguidores seguramente les encantaría conocer estas obras
, explica la productora y locutora del programa Gente de cine, que en junio pasado cumplió 22 años al aire.
Este año se conmemoran 37 de la muerte de genio alemán, quien precisamente sólo vivió 37 años. A partir de esta efeméride, Riquer preparó Constelación Fassbinder, curso con 13 lunas y tres astros circundantes, en el que se conocerá la evolución del director, desde sus inicios en el teatro, sus primeros cortometrajes y sus películas más representativas.
El curso comenzó, de manera privada en la Escuela Superior de Cine y a partir del 4 de julio se ofrecerá a todo público mayor de edad en la Cineteca Nacional en 16 sesiones, entre el 4 de julio y el 16 de octubre. Mayores informes, en el correo [email protected] o el teléfono 41551200 extensión 3264.