Convocados con premura para una reunión del gabinete ampliado después del desencuentro en la tierra del Nayar que evidenció los retrasos en el censo de los programas sociales, el presidente Andrés Manuel López Obrador reconvino a los delegados del gobierno federal en las entidades.

En el encuentro privado les exigió dejar a un lado el concepto del cargo como fórmula para hacer relaciones públicas y labrar una carrera política, para dedicarse a operar la política social.

Al término, Carlos Lomelí, delegado en Jalisco, dio otros detalles y aseguró que el Presidente los conminó a redoblar el esfuerzo: Nos pidió que estuviéramos muy pendientes dando seguimiento personalizado a los programas. Que vayamos a ras de tierra, nos metamos abajo. Que ahí es en donde tenemos que escuchar a la gente y dejemos a un lado el escritorio para ir al último rincón de los municipios.

La convocatoria a la reunión de gabinete fue apresurada. Apenas el fin de semana, durante su incursión en el Nayar ante comunidades indígenas huicholes, coras y tepehuanes, el presidente preguntó si las comunidades indígenas ya estaban censadas. La intención fue frustrada porque detectó que prácticamente no había avance, lo que irritó al mandatario quien reviró que a eso va al encuentro de las comunidades, para conocer la realidad en voz del pueblo.

Este lunes en Palacio Nacional, después de que se dieran pormenores del ejercicio presupuestal, en especial en los programas sociales, los ecos del Nayar salieron. El presidente López Obrador enfocó sus críticas hacia los delegados federales a quienes exigió mayor compromiso social y dejar a un lado intereses personales y políticos, producto de la irritación por lo sucedido en Nayarit.

Al ser entrevistado tras finalizar la reunión, Lomelí estimó que por complejidades logísticas la aplicación de los programas sociales avanza con la estimación de que será hasta dentro de un año cuando operarán plenamente. Para entonces estará completado el censo de todos los beneficiarios y los recursos llegarán por el esquema directo y electrónico que se tiene previsto.

El delegado federal consideró que los problemas que han sido criticados públicamente sobre inconsistencias y retrasos en la aplicación del programa son, en términos generales, casos aislados: Debemos de entender que algo que es muy importante es que lo que tenemos hoy por censo es fidedigno, es real y que ya se comenzaron a bajar los apoyos.