El Congreso de la Ciudad de México prevé incorporar en la Ley de Cultura Cívica como infracciones contra la seguridad ciudadana las faltas al reglamento de tránsito que sean registradas por los dispositivos electrónicos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana e incorporar al catálogo de conductas que son motivo de sanción, como proferir silbidos o expresiones verbales de connotación sexual a una persona con el propósito de afectar su dignidad.

Estas son algunas modificaciones que contiene el proyecto de dictamen que será discutido este lunes en comisiones del Congreso local a la iniciativa que envió la jefa de Gobierno capitalina, Claudia Sheinbaum Pardo, para su posterior aprobación en el pleno.

Al agregar un capítulo relativo a las infracciones de tránsito, con el esquema de penalización por puntos a la matrícula y en el que se plantea la creación de juzgados especializados en esa materia, el Congreso prevé reforzar el sustento jurídico de las fotocívicas.

De entrada, el proyecto de dictamen elaborado por las comisiones de Procuración y Administración de Justicia y de Participación Ciudadana consideró que no era necesario abrogar la ley, como plantea el proyecto de la jefa de Gobierno, dado que la mayoría de las disposiciones no sufren modificación, pero preserva el espíritu de la propuesta que fortalecerá la mediación como vía de solución a transgresiones a la norma originadas por conflictos entre particulares y cambiar la visión recaudatoria y punitiva de la ley por una de prevención social de la violencia y la cultura de la paz.

En otros cambios, el proyecto agrupa en un solo apartado las infracciones para facilitar su lectura y las clasifica según las sanciones que corresponden. En el caso del trabajo comunitario, se reducen las horas a la mitad de la propuesta original y además de esas actividades la sanción podrá cubrirse con la asistencia a cursos, terapias o talleres para corregir el comportamiento del infractor.