Pumas se niega a despedirse del torneo y de manera fortuita rescató un trascendental triunfo 1-0 sobre Tijuana, en un encuentro donde el técnico Bruno Marioni robó los reflectores al ser expulsado por caer de nueva cuenta en un arrebato de enojo.

Un gol de Carlos González (87) salvó a los felinos para que llegaran a 16 unidades y escalaran al peldaño 13, aunque sus posibilidades de liguilla son escasas, ya que deben tener un cierre perfecto, además de esperar una combinación de resultados. Los Xolos se rezagaron en la pelea y se quedaron con 22 puntos en octavo puesto, el último que da la clasificación, en la jornada 14 del Torneo Clausura 2019.

Con una temporada de altibajos, Pumas estaba en riesgo de quedar eliminado de manera prematura, por lo que sus jugadores tomaron el control en el estadio Olímpico Universitario, aunque les costaba trabajo concluir los ataques.

Óscar Pareja, timonel de Tijuana, sorprendió al dejar en la banca al arquero Gibrán Lajud y salió con el juvenil Carlos Higuera para sumar minutos en la regla 20/11, al ser el club que menos tiempo ha acumulado con jóvenes.

Víctor Malcorra aprovechó un tiro de esquina para rematar con un cabezazo, pero el esférico se fue por el costado izquierdo. Los felinos imponían el ritmo, pero fallaban en los pases, mientras a Xolos le era complicado superar la media cancha.

Los auriazules buscaron oportunidades con un disparo de poco calibre de Felipe Mora y un tiro de larga distancia de Kevin Escamilla que se fue alto. El tiempo avanzaba y las emociones no llegaban, por lo que al descanso la afición lanzó abucheos para exigir que los jugadores arriesgaran más.

Marioni modificó su sistema en la segunda parte y sacó a Malcorra, así como a Martín Rodríguez, y envió a la cancha a Juan Manuel Iturbe y a Pablo Barrera, pero los cambios no tuvieron impacto en el duelo.

Los visitantes intentaban acercarse con ataques por las bandas, pero el ariete Ariel Nahuelpán no atinaba a conectar el esférico y en más de una ocasión dejó escapar la posibilidad de soltar una estocada.

El letargo invadía el recinto, hasta que llegó la polémica para dar un giro al encuentro. Presa de la desesperación y del nerviosismo, Marioni le aventó el balón al zaguero de Xolos Omar Mendoza, los jugadores y el silbante Jorge Isaac Rojas se arremolinaron, se desató un altercado y el técnico se fue expulsado.

Cuando parecía que los universitarios estaban sentenciados a la eliminación, apareció Carlos González con un remate de testa en un tiro de esquina para darle a los felinos la agónica victoria.

Al término del encuentro, Leandro Augusto, director deportivo de Pumas, dijo que están conscientes de que no dependemos de nosotros para avanzar a la liguilla, pero el resultado nos da esperanza. Aseguró que la directiva hablará con Marioni y habrá una sanción interna. Fue la calentura que nos pasa a todos, pero trataremos de ayudarlo y a todo el equipo.