Zapopan, Jal., El presidente Andrés Manuel López Obrador confirmó que el comandante en jefe de la Guardia Nacional (GN) será un militar en activo, cuya identidad se dará a conocer la semana próxima, al igual que de los integrantes del Estado Mayor de la corporación: uno del Ejército, otro de la Marina y uno más de la Policía Federal.

Al mismo tiempo subrayó que su gobierno no se enfocará en perseguir a determinado cártel, sino a brindar seguridad a la población.

Ante la solicitud del presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos de privilegiar el mando civil en la GN, el mandatario prometió un proceso de reconversión en las fuerzas armadas, con énfasis en la capacitación en derechos humanos y uso moderado de la fuerza. Nunca daré la orden de reprimir al pueblo, dijo.

El martes recibirá en Palacio Nacional a Michelle Bachelet, titular del Alto Comisionado de la Organización de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, a quien dirá también por qué requiere al Ejército.

“Le expliqué (al ombudsman) por qué consideraba que debía ser un militar el comandante, el jefe de la Guardia Nacional, porque vamos a contar con el apoyo del Ejército. Estoy hablando de una reconversión en el Ejército y necesitamos un elemento de esta institución, además con experiencia, disciplina, rectitud, honestidad, con profesionalismo. Y ya lo tenemos”, dijo.

A partir de la reforma constitucional –para sustentar la creación de la GN– se podrá disponer de 220 mil elementos de las fuerzas armadas y 40 mil de la Marina; el mandatario anunció la incorporación de 50 mil elementos más, para cubrir las 236 coordinaciones territoriales.

Cambio de estrategia

En la conferencia de prensa matutina, realizada en la Base Aérea de la quinta región militar, ubicada en este municipio, donde se llevó a cabo la reunión cotidiana del gabinete de seguridad, se le preguntó de la estrategia para combatir al Cártel Jalisco Nueva Generación.

El mandatario –al igual que el secretario de la Defensa Nacional, Luis Sandoval– señaló que el objetivo no son los operativos, detenciones o decomisos espectaculares.

“No se trata ya de operativos, como era la costumbre, operativos contra un cártel en particular, nos interesa la seguridad pública, ese es el cambio”, respondió.

Al dar un balance en la materia, acompañado de integrantes del gabinete de seguridad y el gobernador anfitrión, Enrique Alfaro, el mandatario aseveró: vamos bien.

En el robo de combustible hay una reducción importante, al pasar de 70 mil a 5 o 6 mil barriles diarios de ese hurto, con lo que se ahorrará (o abonará al erario) 50 mil millones de pesos este año de esa actividad con arraigo social y tolerada por las autoridades, lo cual provocó la desgracia de Hidalgo, lamentó. Entonces, cuando digo que estamos ganando es que no es lo mismo que se roben 800 pipas diarias a que se roben 40.

Violencia

En el tema de homicidios dolosos, el Presidente precisó que el jueves pasado se reportaron 80 crímenes de este tipo, 15 más que un día anterior, aunque esta situación se concentra en las entidades en las que hay bandas del crimen. Es así, indicó, que en 15 estados nadie perdió la vida.

Antes, el general Luis Sandoval admitió que en el análisis en materia de seguridad en Jalisco, donde están desplegados 7 mil 500 efectivos de fuerzas federales, se identificó la presencia de organizaciones delictivas, trasiego importante de drogas, producción y venta de drogas sintéticas, así como descomposición del tejido social y agresiones a autoridades civiles, militares y navales. Prevalece el robo de combustible.