El Cuarteto de Cuerdas Margie y la Banda de Música de los Pueblos Indígenas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) ofrecieron ayer un concierto en la zona de las islas, en Ciudad Universitaria, para festejar el inicio de la primavera.

Se busca que este recital se convierta en una tradición para la comunidad universitaria, dijeron funcionarios de la esa casa de estudios poco antes de que se iniciaran las primeras notas de Canon, de Johann Pachelbel.

El concierto fue organizado por el Programa Universitario de Estudios de la Diversidad Cultural y la Interculturalidad, dirigido por José del Val, y la Dirección General de Atención a la Comunidad, a cargo dec Mireya Ímaz.

La tarde comenzó con las palabras de Ímaz, quien destacó que se trata de un concierto cuyo objetivo es ‘‘ser y hacer comunidad”. Adelantó que ‘‘se realizará año con año en este espacio para celebrar la llegada de la primavera y que se convierta en una tradición.

‘‘La primavera llegó y es un excelente pretexto para iniciar proyectos, comenzar ciclos, sembrar semillas, salir a convivir con la naturaleza y reunirse con los amigos, como estamos haciendo hoy” en este concierto, ‘‘el segundo que se realiza por la Dirección General de Atención a la Comunidad para reunirnos al aire libre, escuchar música primaveral y conocer nuevos amigos y amigas.

‘‘Queremos que sea un encuentro que contribuya a construir comunidad, para tomar un respiro antes de las semanas de exámenes y disfrutar nuestros espacios universitarios y hacerlos de todas y de todos.”

José del Val recordó que el programa universitario que dirige cuenta con un sistema de becas para integrantes de los pueblos indígenas ‘‘de cerca ya de mil becas continuas y tiene también una materia transversal que es México nación multicultural. Este programa intenta desarrollar el carácter de interculturalidad y darle a ésta el sentido de equidad para que sea importante en este nivel”.

Añadió que ‘‘se trata de una oportunidad extraordinaria de que los estudiantes puedan expresarse aquí continuamente con otros mexicanos que son de otros pueblos, otros territorios o regiones”.

El Concierto de primavera lo inició el Cuarteto de Cuerdas Margie con Canon, de Pachelbel; Concerto 1. La primavera, allego largo e pianísimo sempre allegro pastorale, de Antonio Vivaldi; Gavota, de Manuel M. Ponce; Habanera, de la ópera Carmen, de Georges Bizet; Por una cabeza, de Carlos Gardel, y Libertango, de Astor Piazzolla. La Banda de Música de los Pueblos Indígenas de la UNAM intepretó Canción mixteca, de José López Alavés; La Llorona; Mariposas en la noche, de Mario Kuri Aldana; Fandango colonial, de Cipriano P. Cerna; Nereida, de Amador Pérez Torres; Sones y jarabes de Betaza; Sones y jarabes mixes, de Rito M. Rovirosa, y Dios nunca muere, de Macedonio Alcalá.