Domingo 17 de marzo de 2019, p. 30
Al menos entre 8 y 12 por ciento de la población desarrollaría en algún momento de su vida una alergia alimentaria, que puede producir desde reacciones leves en la piel hasta choque anafiláctico, lo que provocaría la muerte, aseguró Raúl Dorbeker Azcona, jefe del Servicio de Inmunoalergias de la Unidad Médico Quirúrgica Juárez.
Explicó que en la población infantil el riesgo aumenta hasta 22 por ciento y que diversos estudios indican que 80 y 90 por ciento de esas alergias son provocadas por siete alimentos: leche de vaca, huevo, trigo, soya, pescados, mariscos y frutos secos.
Por ello, recomendó tener especial cuidado en los primeros años de vida, ya que es la etapa en que más frecuentemente se diagnostica la alergia alimentaria, aunque también puede aparecer en la edad adulta.
Sugirió iniciar la dieta de los menores con alimentos preparados por separado para confirmar que hay buena tolerancia. Precisó que el único alimento que debe excluirse en los 12 primeros meses de vida es la leche entera. Todos los demás se pueden consumir, pero de manera paulatina y progresiva, principalmente, huevo, pescado y fresas.
Los síntomas de la alergia alimentaria son variables, dependen de la edad del paciente y del alimento al cual se es alérgico. Una de las más comunes en la población infantil es la proteína de leche de vaca y se manifiesta con alteraciones cutáneas, problemas respiratorios como flujo nasal, estornudos, tos y eventos de broncoespasmo.
También pueden provocar problemas digestivos como reflujo, constipación, estreñimiento, diarrea, evacuaciones con sangre, gases y distensión abdominal.
En los adultos los alimentos que más alergias provocan son pescado y mariscos, con sintomatología similar: urticaria (ronchas en la piel), hinchazón de boca y labios e incluso un episodio de anafilaxia, agregó.