La desaparición forzada desencadenada en México entre 2006 y 2018, a raíz de la guerra contra el narcotráfico que emprendió el gobierno federal de aquel entonces, es tema de la pieza sonora multicanal Vis. Fuerza (in)necesaria_4, de la investigadora y artista mexicana Luz María Sánchez, la cual se expone desde ayer en el Museo Universitario Arte Contemporáneo(MUAC), del Centro Cultural Universitario (CCU).

El proyecto forma parte del proceso de colaboración entre la artista y el colectivo Las Rastreadoras, del municipio El Fuerte, ubicado en Los Mochis, Sinaloa, con apoyo del Grupo de Investigación en Antropología Social y Forense.

El colectivo está integrado por familiares de desaparecidos, sobre todo mujeres (madres, esposas, hermanas, hijas), que de manera frecuente realizan expediciones en las zonas desérticas aledañas a Los Mochis para buscar indicios de restos humanos o fosas clandestinas.

En charla con La Jornada, Luz María Sánchez dice que en 2019 el registro de desaparecidos en México asciende a más de 40 mil personas, en su mayoría jóvenes de entre 18 y 25 años, lo cual refleja una enorme crisis de derechos humanos.

Vis. Fuerza (in)necesaria_4 es el cuarto proyecto que desarrolla Sánchez en el contexto de la violencia en el país.

El primero abordó las balaceras, del que surgió una pieza que actualmente se exhibe en la exposición Modos de oír, en el Laboratorio Arte Alameda. El segundo implicó el trabajo sicológico de terapias infantiles en Ciudad Juárez.

El tercero es un proyecto todavía en proceso, una aplicación telefónica a partir de la cual se pretende articular una cibercartografía para sistematizar los datos y archivos arrojados en las búsquedas de desaparecidos.

La plataforma se implementará con fines prácticos.Por un lado articula la documentación audiovisual de esas expediciones, además de servir como espacio de memoria y testimonio, explicó Sánchez.

De ese tercer proyecto se desprende la pieza sonora multicanal Vis. Fuerza (in)necesaria_4, la cual registra el proceso de búsqueda.

La pieza tiene tres capas principales de sonido. La primera agrupa los sonidos in situ de la búsqueda, el esfuerzo de cavar con palas, picos y demás herramientas.

La otra capa sonora, con el fin de que la pieza no fuera tan necrofílica, comenta Sánchez, registra la fraternidad, las bromas, la convivencia entre las mujeres.

En un tercer nivel se escuchan dos preguntas que guían la labor del colectivo: ¿dónde? y ¿por qué?

Los audios son cortos, de unos tres minutos, por lo que en 10 ya se escuchó toda la pieza. El público podrá decidir si sólo escucha uno o los tres. Lo que se pretende es que el espectador se acerque a esa realidad por medio de una escucha activa.

Aparte, en uno de los patios del MUAC, se colocan unos altavoces y una escultura hecha con una herramienta llamada varilla T, que permite realizar un orificio en la tierra y detectar el olor de restos biológicos sin necesidad de cavar.

Vis. Fuerza (in)necesaria_4 se presenta en el Espacio de Experimentación Sonora del MUAC, del CCU, hasta el 21 de julio.