Entrevista con Cristina Cruz
Domingo 17 de marzo de 2019, p. 26
El plan de pensión universal para personas adultas mayores de 68 años en Ciudad de México, absorbido por la administración federal, tiene como meta incrementar el padrón de 525 mil personas registradas por el gobierno capitalino a más de 850 mil, y se incorporó –de entrada– a 88 mil pensionados del IMSS y a otros 49 mil del Issste, informó María Cristina Cruz Cruz, delegada estatal de programas integrales de desarrollo para esta entidad.
Explicó que otros dos programas locales que administrará la Federación, Prepa Sí –con un padrón de 215 mil jóvenes, ahora como becas Benito Juárez–, crecerá a 360 mil beneficiados, y en el caso del apoyo económico a personas con discapacidad permanente, que tiene 77 mil 306 personas a las que se da una ayuda mensual de 800 pesos, recibirán cada bimestre 2 mil 550 pesos.
Al ser entrevistada en su oficina de la colonia Juárez, Cruz Cruz dijo que aún hay confusión en la ciudad sobre la pensión para adultos mayores porque se dijo en campaña que se duplicaría, y es así, pero sólo el programa federal, que consistía en un apoyo bimestral de mil 160 pesos y aumentará a 2 mil 550, aunque en la ciudad era de mil 209 pesos mensuales y eventualmente a partir de que el gobierno federal se haga cargo del programa el mes próximo se homologará también al pago bimestral, además de que migrará del monedero electrónico, que sólo les permitía adquirir productos básicos, a una tarjeta bancaria con la que podrán disponer de dinero en efectivo.
Para el apoyo de jóvenes, además de la beca Benito Juárez destinada a estudiantes de nivel medio superior –con monto por mes de 800 pesos durante 10 meses por tres años– destacó el programa jóvenes construyendo el futuro con una meta física de 110 mil beneficiarios en la ciudad que recibirán 3 mil 600 pesos mensuales y seguro facultativo para vincularlos con empresas, negocios u organizaciones como aprendices.
El programa está dirigido a jóvenes de 18 a 29 años que no estudian ni trabajan, “los mal llamados ninis”, denominación que Cruz prefiere adaptar a que ni gobierno ni sociedad tuvieron capacidad de brindarles oportunidades
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Sin embargo, admitió que cuesta trabajo convencer a los empresarios, pues si bien muestran interés, también tienen dudas porque en muchos jóvenes no hay credibilidad, lo que atribuyó a una descomposición social por años de crisis económica y de valores, pero que es posible recomponer al brindar opciones. Tal vez sea de las cosas que más tiempo nos tomen, pero debemos atender de manera urgente a los jóvenes porque son el relevo generacional que puede hacer de este país algo diferente
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Sobre las estancias infantiles, admitió que la decisión de entregar los apoyos de manera directa a las madres y no a quienes las operan generó polémica, pero es más por desinformación
, y aclaró que el gobierno no ha cerrado estancias que son operadas por particulares, aunque al constituirse se les dio una aportación de 70 mil pesos para equipamiento.
Comentó que en la revisión del programa encontraron casos en que se denunció maltrato a menores y se retiró la subrogación, pero la estancia funcionaba; en Iztapalapa, además del apoyo gubernamental cobraban cuotas de hasta 3 mil 500 pesos y hay beneficiarios que no corresponden al sector apoyado.
Hay muchas irregularidades, un montón de cosas que ahora no voy a decir porque no me corresponde
; agregó que el programa apoyo para el bienestar de niñas y niños hijos de madres trabajadoras otorgará un apoyo de mil 600 pesos cada dos meses para menores de un año y menos de cuatro y de 3 mil 600 hasta antes de cumplir seis cuando tienen alguna discapacidad.