El estímulo fiscal que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) aplicó a los impuestos a las gasolinas a inicios de semana, implicará una reducción de 4 por ciento en las transferencias federales a los estados a lo largo del año, consideró la agencia calificadora Moody’s.

Subrayó que si bien en el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2019 se proyecta que estas participaciones federales a los estados crecerán 13 por ciento respecto al año pasado, los ajustes hechos por la dependencia implican que sólo lo harán 9 por ciento.

Las participaciones federales –que se agrupan en el Ramo 28 del PEF– son recursos federales que se entregan a las entidades federativas con base en los impuestos que cada demarcación, con su actividad económica, aporta al erario y están compuestas por diversos fondos. Estas transferencias no se etiquetan y representan 40 por ciento del ingreso de los estados.

La SHCP expuso el lunes pasado que las participaciones cayeron 1.2 por ciento en enero a consecuencia de una reducción de 33.8 por ciento en el Fondo del Impuesto Sobre la Renta y una disminución de 18.4 por ciento en el fondeo de participaciones que se recoge sobre automóviles nuevos, por efecto de la caída de 21.1 por ciento en las ventas de autos nuevos registradas en el mismo mes.

A la par de que decreció 3.5 por ciento en ese mes el apartado de participaciones por el impuesto especial sobre producción y servicios a la gasolina y diésel –cuando aún no se establecía el estímulo fiscal por Hacienda– esperamos que se reduzca aún más con la resolución del lunes pasado, alertó Moody’s.

De acuerdo con la calificadora, ello implica que al menos cinco estados se verán más afectados en el flujo de efectivo para realizar el gasto a corto plazo.

La mayor disminución en participaciones federales en el mes de enero de 2019, se presentó en la Ciudad de México y en los estados de Colima, Puebla, Chiapas y Michoacán. La liquidez de estas entidades pudiera verse debilitada temporalmente, a consecuencia de la reducción, informó en un análisis.

No obstante las reducciones en los rubros anteriores, la caída en las transferencias fue atenuada porque el Fondo General de Participaciones (FGP), cuyo peso es el mayor, pues comprende 70 por ciento de las participaciones federales, aumentó 10.8 por ciento en enero.

Además que en orden de obtener mayor liquidez, también los estados disponen del Fondo de Estabilización de los Ingresos de las Entidades Federativas, con 88.7 mil millones de pesos en él para compensar las disminuciones en las participaciones federales. Dicha cifra, agregó Moody’s, podría cubrir una disminución de 9.6 por ciento en las participaciones presupuestadas en 2019.