El gobierno necesariamente debe considerar la federalización de la ciencia, la tecnología y la innovación simplificando las estructuras. Esa visión debe estar presente en el diseño de todos los instrumentos jurídicos, de gobernanza, de planeación y de financiamiento, atendiendo igualmente a la disminución de las brechas en capacidades científicas y tecnológicas, señaló Jaime Valls, secretario general ejecutivo de la Asociación de Universidades e Instituciones de Educación Superior (Anuies) durante el conversatorio para el análisis del sistema nacional de ciencia y tecnología.

El representante de la Anuies ponderó que de los 28 mil 633 investigadores registrados en el Sistema Nacional de Investigadores, sólo 31.5 por ciento se encuentran en la Ciudad de México. Por otra parte, las capacidades de las 35 universidades públicas estatales, 22 públicas estatales de apoyo solidario, las 117 tecnológicas, las 62 politécnicas y las 10 interculturales, así como los 254 institutos del Tecnológico Nacional de México, rebasan con mucho las capacidades académicas de las instituciones de Ciudad de México.

Hoy la sociedad reclama mayor participación; los gobiernos, en sus distintos órdenes, son más corresponsables y vivimos una democratización en todos los ámbitos de la vida nacional. También hay una sociedad científica y tecnológica más atenta, internacionalizada, organizaciones e instituciones de educación superior, consejos y organismos estatales de ciencia y tecnología y un sector empresarial innovador más capaz y competitivo.

Y así, a la par de promover los temas estratégicos como la soberanía alimentaria, agua, lucha contra el cáncer, medio ambiente y ciencia de frontera, necesarios para el desarrollo nacional, la política de ciencia y todos sus instrumentos jurídicos, organizacionales y de gestión deben impulsar, asimismo, la investigación interdisciplinaria orientada al desarrollo regional y local en el contexto de la Agenda 2030 sobre el Desarrollo Sostenible, precisando los temas del bienestar social y el cuidado del ambiente, considerando que el conocimiento científico y tecnológico es un bien público y social responsabilidad de todos, pero fundamentalmente del Estado.

Asumimos con toda responsabilidad el compromiso de contribuir con las instituciones del Estado y la sociedad a la construcción de un renovado Sistema Nacional de Ciencia Tecnología e Innovación; un sistema sólido, federalizado, articulado, incluyente y subsidiario que promueva la participación corresponsable de todos los actores académicos, políticos, económicos y sociales de México y que impulse el desarrollo justo, equilibrado y sostenible de la nación para alcanzar el sueño de una sociedad del conocimiento.