La Dirección General de Servicios Aéreos (DGSA) de la Fiscalía General de la República (FGR) comenzó un proceso de restructuración y analiza disminuir el número de bases aéreas que posee en el país, además de revisar la plantilla de técnicos, operadores y pilotos para hacerla más funcional.

La DGSA vive una crisis, ya que en la mayoría de sus bases hace tiempo que no se da mantenimiento ni despacho a aviones o helicópteros y la mayor parte de las naves que tiene son arrendadas o fueron donadas por el gobierno de Estados Unidos, señalaron empleados.

En los años 90 del siglo XX la flota de lo que era la Procuraduría General de la República llegó a ser considerada la aerolínea más grande de América Latina, con 180 naves, pero con la llegada de Felipe Calderón comenzó su desmantelamiento. Funcionarios de la FGR revelaron que en semanas recientes se han presentado denuncias en contra del ex director de Servicios Aéreos, el general en retiro José Antonio Ramos Arévalo.

En enero de 2007 la mayor parte de la flota destinada a detectar y fumigar cultivos ilícitos en el país fue transferida por decisión presidencial a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), que prácticamente quedó como responsable de la destrucción mediante aspersión del herbicida paraquat.

Con esa acción también se transfirió a la Sedena al personal de mantenimiento y pilotos especializados en el combate a esos cultivos.

En 2009 la propia PGR inició una investigación que involucró a más de 120 funcionarios, pero nunca se dieron a conocer sanciones en contra de quienes supuestamente participaron en actos de corrupción.

En 2016 el Ministerio Público Federal investigó de nueva cuenta, ya que presuntamente estaban involucrados Ramos Arévalo y el piloto aviador Jesús Gualterio González, responsable de capacitación. La denuncia se abrió tras la difundirse una grabación en la cual el general ofreció a un grupo de militares arreglar que obtuvieran las licencias que otorga la Dirección General de Aeronáutica Civil, dependiente de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, así como enviarlos a cursos de capacitación a Israel o Canadá para integrarse a un proyecto de drones en la PGR.

Hace unas semanas Alejandro Gertz Manero, titular de la FGR, sustituyó a Ramos Arévalo y de acuerdo con información de empleados en activo que pidieron el anonimato, más allá de que se investiguen irregularidades durante la gestión del militar en retiro, ya se ha mencionado que se hará una revisión de la operatividad de toda la dirección y la posibilidad de que se ponga en marcha un programa de retiro voluntario y cese de personal.

El pasado 21 de febrero en la FGR se presentó una denuncia en la que se acusa a Ramos Arévalo y a más de 20 altos funcionarios por cometer actos de nepotismo, amiguismo y desvío de recursos. El escrito fue presentado por el capitán piloto aviador Néstor Bautista González, quien se ostenta como servidor público adscrito a esa dirección.

Mandos de la FGR señalaron que a Gertz Manero le interesa contar con naves para destruir cultivos ilegales, además de tener una flota que sirva para el traslado de detenidos y personal de la Policía Federal Ministerial en situaciones que requieran rápida respuesta, pero ahora hay pocas aeronaves y se revisan las condiciones de cada una ya que, si son helicópteros, muchos fueron donados por Estados Unidos.