errores y omisionessalen del país 13 mil 658 millones de dólares
Último año de gobierno de Peña Nieto, informa el Banco de México
Martes 26 de febrero de 2019, p. 21
Al concluir 2018, último año de gobierno de Enrique Peña Nieto, el rubro de errores y omisiones de la balanza de pagos del Banco de México (BdeM), en el que se contabilizan las operaciones de la delincuencia organizada, registró un crecimiento de 40 por ciento respecto de 2017.
El banco central identificó en ese rubro una salida de capitales del país de 13 mil 658 millones de dólares el año pasado, monto 3 mil 908 millones superior a los 9 mil 750 millones reportados en 2017.
La balanza de pagos, sistema contable dinámico que registra los ingresos y salidas de divisas por el intercambio de mercancías y servicios con el exterior, cuenta con un renglón de ajuste mediante el cual se detectan por omisión las entradas y salidas de recursos de la economía mexicana por operaciones de lavado de dinero, contrabando de todo tipo, sobre y subfacturaciones en la exportación e importación de mercancías, así como transacciones de narcotráfico y un amplio abanico de ilícitos de la llamada economía subterránea.
Por otro lado, en 2018, la cuenta corriente tuvo un déficit de 22 mil 186 millones de dólares, mientras la cuenta de capital resultó deficitaria en 65 millones de dólares, informó el BdeM.
En un contexto de desaceleración de la economía mundial, por el recrudecimiento de las tensiones entre Estados Unidos y China, el año pasado el déficit de la cuenta corriente se ubicó en 1.8 por ciento del producto interno bruto (PIB), cifra superior a la observada en 2017, cuando fue de 1.7 por ciento.
En tanto, la cuenta financiera presentó un endeudamiento neto que implicó una entrada de recursos por 35 mil 909 millones de dólares, incluyendo un aumento de los activos de reserva por 483 millones.
El BdeM destacó que persiste la incertidumbre por las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China, el proceso de salida de Reino Unido de la Unión Europea, la posibilidad de que se observe un crecimiento de Pekín menor al esperado y un escalamiento de las tensiones políticas y geopolíticas en distintas regiones del orbe.
Explicó que el mayor déficit en 2018 fue reflejo de los aumentos de los déficits de la balanza comercial petrolera y de la cuenta de ingreso primario, los cuales fueron parcialmente compensados por incrementos de los superávits de la balanza de mercancías no petroleras, de la cuenta de viajes y de la cuenta de ingreso secundario.
El banco central agregó que durante 2018 persistió un entorno de marcada incertidumbre, asociada a factores globales y a otros directamente relacionados con la economía nacional, lo cual condujo a que la restricción de financiamiento externo se agudizara.
Entre los factores externos figuraron las tensiones comerciales, el proceso de normalización monetaria en Estados Unidos y riesgos políticos y geopolíticos.
En relación con los factores que tienen una incidencia más directa sobre la economía mexicana, detalló que durante la primera mitad del año destacó la incertidumbre asociada con el proceso electoral.
Sin embargo, en 2018 la economía siguió captando recursos mediante la cuenta financiera por concepto de inversión directa y de cartera.