Domingo 10 de febrero de 2019, p. 15
San Francisco. Aunque no está muerto, el mercado de los teléfonos inteligentes ha caído debido a los altos precios y a otros factores que, combinados, enfriaron las previsiones para un sector hasta hace poco floreciente.
Las cifras son poco halagüeñas: en 2018 el sector sufrió su peor caída de ventas y las previsiones para este año no son mejores.
A pesar de esos datos, los analistas no creen que se haya apagado la llama de la era de los smartphones, dispositivos vistos como imprescindibles por muchos ciudadanos en todo el mundo.
Aún no tienen sustituto viable
, afirma sobre los teléfonos inteligentes Rob Enderle, analista independiente de Silicon Valley.
“Siempre existe la posibilidad de ir a los wearables (aparatos o complementos de uso diario convertidos en dispositivos electrónicos) o gafas de realidad virtual (HMD), pero ninguno ha surgido como amenaza real”, agregó.
El volumen de teléfonos inteligentes en todo el planeta cayó 4.1 por ciento en 2018, a mil 400 millones de unidades enviadas, según la firma IDC, la cual prevé que este año la tendencia se puede mantener.
Para Werner Goertz, analista de Gartner, empresa dedicada a las investigación de tecnologías de la información, el mercado de esos teléfonos vivirá cierta estabilización a finales de año.
Los teléfonos móviles están aquí para quedarse
, afirma Goertz y sugiere que los consumidores podrían estar esperando aparatos con nuevas funciones.
Los teléfonos plegables representarían una buena característica disruptiva
, comenta.
Analistas señalan que las fluctuaciones en las ventas también las enfrentaron otros productos tecnológicos, como los ordenadores portátiles.
Los mercados siempre se ralentizan cuando las compañías tienen que gastar más en mercadotecnia para que la gente salga y compre
, explica Enderle.
Algunos consumidores esperan a cambiar sus aparatos debido al aumento de precios de los productos de gama alta, como el iPhone, dice el analista independiente.
¿Comida o teléfono?
Incluso, el presidente ejecutivo de Apple, Tim Cook, en la presentación de resultados de la empresa, advirtió que los consumidores alargan la vida útil de los teléfonos.
Otra razón que esgrimió Cook para justificar el frenazo en las ventas del iPhone fue el recorte en las ayudas que dan las compañías telefónicas para garantizar la permanencia del servicio durante un tiempo, lo que se traduce en que los consumidores tienen que hacer frente al pago de más de mil dólares por algunos de los teléfonos más caros del mercado.
La gente no quiere gastar otros mil dólares para remplazar algo que no está roto
, sostiene el analista Enderle.
En mercados emergentes no se puede hacer que la gente pague una cuarta parte de sus ingresos mensuales por un teléfono; no renuncia a comida por mensajes de texto
, expresa.
En un gesto inusual, Apple redujo precios en algunos de esos mercados para mitigar los efectos de la subida del dólar estadunidense.
Cook aseveró en enero pasado que en algunos lugares y para algunos productos su compañía “absorbió parte del movimiento de la divisa extranjera para acercarse a los precios de un año atrás en esos mercados.
Sí, el precio es un factor
, admitió Cook.
Desastre en el mercado
No obstante, los datos más recientes sugieren que los días de crecimiento desenfrenado de los teléfonos inteligentes son cosa del pasado y que el lento crecimiento o la contracción son probables en muchos mercados saturados.
Sin ir más lejos, Apple reveló recientemente una insólita caída de sus ingresos en el cuarto trimestre del año pasado. Samsung, el mayor fabricante de teléfonos inteligentes de Corea del Sur, informó de una reducción en sus beneficios en ese mismo periodo, culpando a una caída en la demanda de sus productos estrella.
“El mercado de los smarthpones es ahora mismo un desastre”, explica Ryan Reith, analista de IDC.
Fuera de un puñado de mercados de alto crecimiento, como India, Indonesia, Corea del Sur y Vietnam, no vimos mucha actividad positiva en 2018
, afirmó.
A la demora para cambiar aparatos y los altos precios se sumó, remarca Reith, la incertidumbre política y económica.
La tendencia fue especialmente marcada en el mercado chino, que representa cerca de 30 por ciento de la venta de teléfonos inteligentes, con una caída de 10 por ciento, según IDC.
Sin embargo, los fabricantes de teléfonos chinos, como Huawei, Oppo y Xiamoi, remaron a contracorriente y acabaron el año con ganancias, según Counterpoint Research.
De acuerdo con el director asociado de Counterpoint, Tarun Pathak, este año es probable que los fabricantes de teléfonos inteligentes inciten a los clientes a actualizar sus dispositivos con innovaciones, como la conexión a la red ultrarrápida 5G y las pantallas plegables.
Se espera que el mayor fabricante de smartphones, Samsung, presente un dispositivo con pantalla plegable en febrero.