En las instituciones de la banca de desarrollo está en marcha un proceso de consolidación, que hasta hora no ha provocado ceses masivos.

Ni siquiera por las fusiones que éste pretende llevar a cabo entre el Banco de Comercio Exterior (Bancomext) con Nacional Financiera (Nafin) y el Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos con la Sociedad Hipotecaria Federal.

Si sólo se toma en cuenta el Presupuesto de Egresos de la Federación, resulta que tres de las nueve instituciones que integran esa banca registraron un aumento en el número de plazas. En conjunto, 104. Otras tres del sector tuvieron un recorte de sólo 15 plazas en total, y las restantes tres permanecieron con la misma cifra que el año pasado.

En contraste, cabe recordar que desde 2018, antes de que entrara en vigor la Ley Federal de Remuneraciones de los Servidores Públicos y de que comenzara el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, aproximadamente 200 funcionarios del Banco de México renunciaron o se jubilaron de manera anticipada para no resultar afectados en sus percepciones.

En cuanto a la banca de desarrollo, destaca el caso del Banco del Ejército y la Fuerza Aérea, que incrementó con 75 puestos nuevos su plantilla laboral, para sumar mil 841.

Banobras tuvo un incremento de 21 puestos, con lo que llegará a mil 67 en total. El Fondo de Capitalización e Inversión del Sector Rural cuenta con ocho puestos nuevos, para sumar 63.

Por el contrario, en el Bancomext se quitaron 13 plazas este año, para un total de 558, y Agroasemex perdió un puesto. Sumó 187. En el Banco del Ahorro Nacional y Servicios Financieros se recortaron cinco, por lo que en total tiene mil 511 plazas.

La Sociedad Hipotecaria Federal se mantiene con los mismos 456 puestos de trabajo que tenía el año pasado y lo mismo sucede con Nafin, que se queda con mil 62.